El sevillista Luis Alberto Romero es la otra operación que tiene en marcha el Córdoba para reforzar la plantilla en la segunda mitad del campeonato. La llegada del jugador gaditano no es nada fácil, pero la entidad blanquiverde ha mantenido diversos contactos con el club de Nervión para que el delantero sevillista llegue en calidad de cedido hasta El Arcángel.

Después del traspaso de Javi Hervás, los contactos entre los clubs han sido fluidos. De hecho, inicialmente se pusieron dos nombres sobre la mesa: el mencionado Luis Alberto y el delantero japones Hiroshi Ibusuki. La cesión de ambos es un objetivo muy difícil de cumplir, aunque en las últimas horas se ha vislumbrado en la entidad blanquiverde una posibilidad por el gaditano, que se desenvuelve en cualquiera de las posiciones de ataque y que ha anotado en el grupo IV de Segunda B cuatro goles. Por parte del Sevilla no hay problema alguno. Monchi ha expresado al Córdoba su disposición a que el futbolista llegue a préstamo hasta el 30 de junio y Marcelino, a pesar de haber contado con él en algún encuentro, también ha dado su visto bueno a la operación. Incluso, el futbolista no ve con malos ojos recalar en un Córdoba que se encuentra disputando los puestos de eliminatorias de ascenso a Primera División. La dificultad principal llega del entorno del jugador, al que no convence que el futbolista juegue en Segunda cuando ya tiene cierta confianza de Marcelino para la máxima categoría. Cuando quedan apenas horas para el cierre, el Córdoba apura plazos por un jugador de calidad.