El Real Madrid, en un partido marcado por sus triples -un total de once- rompió ayer la racha de Unicaja de Málaga, que llevaba doce triunfos consecutivos en su cancha, desde que se hizo cargo del equipo el técnico Jesús Chus Mateo, en la pasada campaña. Fue a partir del segundo cuarto cuando el Real Madrid fraguó su triunfo, ya en que en la primera manga el partido fue mucho más nivelado e incluso Unicaja acabó el parcial con una ventaja de tres puntos.

El primer cuarto fue trepidante, con un gran acierto en los lanzamientos (ambos equipos aprovecharon nueve de los trece de dos), y en donde a la efectividad de Darden (diez puntos) y Freeland, en Unicaja, el Madrid opuso a un Ibaka intimidador y con seis puntos. Al final 24-21.

Los comienzos de la segunda manga fueron prometedores para el Real Madrid. Reaccionó Unicaja, pero otra vez Carlos Suárez, con un triple, puso a su equipo con una ventaja de siete puntos (30-37, mediado este cuarto), la máxima hasta entonces del choque.

Dos triples casi consecutivos de Rudy Fernández pusieron a Unicaja contra las cuerdas: 41-50, a falta de 1.22 para el descanso, y que Daycee Carroll se encargó de aumentar con otro tiro de tres puntos (42-53).

Los madridistas dejaron el partido encarrilado con cuatro triples en los albores del tercer tercio, que llevaron las diferencias a los 17 puntos.