Por si acaso, coincidiré mañana (y pasado y al otro...) con Lucas Alcaraz en que la prudencia debe ser la compañera de viaje del Córdoba CF en este primer trayecto de Liga, y más aún si empezamos con una clara victoria en Salamanca. Pero también me atrevería a recomendar lo mismo en el caso contrario, es decir, si el equipo cae derrotado. Porque la moderación debería siempre mostrarse en ambas direcciones. Y no siempre en la que mejor convenga para el beneficio propio. Eso no sería ponderación, sino oportunismo.