Lucas Alcaraz dividió en la tarde de ayer a su plantilla. Diez de los 11 titulares en el Antonio Peroles de Roquetas permanecieron en el estadio municipal El Arcángel, ejercitándose en el gimnasio y haciendo recuperación. Por su parte, Oriol, Iñigo Díaz de Cerio y el resto de jugadores, que fueron suplentes o que ni tan siquiera se desplazaron hasta tierras almerienses celebraron una sesión en la ciudad deportiva Rafael Gómez. Entre ellos, Fran Cruz, central del filial blanquiverde y centro de las miradas ante la lesión de Gaspar Gálvez.
De hecho, en el ejercicio final con balón, con jugadas de apertura a banda y disparo a puerta, el centro de la defensa estuvo formado por el canterano y el segundo entrenador, Alessandro Pierini. Curiosamente, otro que destacó con sus centros fue Mikel Dañobeitia, que se encuentra en una comprometida situación tras la llegada de Juanmi Callejón.
Durante los ejercicios previos de calentamiento ordenados por el preparador físico blanquiverde, Esaú Sánchez, participó José Luis Cabrera, que poco a poco va integrándose al grupo.
La decisión del técnico estuvo provocada por la llegada de la expedición cordobesista tras el amistoso en Roquetas de Mar, en torno a las 3 de la madrugada de ayer. Además, el viaje en autobús estuvo influenciado por las tormentas que afectaron a diversas comarcas andaluzas durante la noche del lunes y la madrugada de ayer, martes.
Posiblemente, gran parte de los que intervinieron ayer en la sesión vespertina formen el grueso de la expedición que ha de desplazarse hoy hasta Almendralejo, donde espera el sexto amistoso de la pretemporada.
