El Córdoba cosechó ayer en el Sánchez Menor de Puertollano su primera victoria de la pretemporada ante unos 2.000 espectadores. El conjunto de Lucas Alcaraz evidenció una evolución en su preparación, más evidente en la primera parte, y basada en la mejoría física, que permitió al conjunto blanquiverde ejercer una presión contra su rival, sobre todo del centro del campo hacia adelante, que provocó numerosas pérdidas de balón del Puertollano y, a la vez, que los de Alcaraz merodeasen reiteradamente el área manchega.

Desde el primer minuto, en un robo de Arteaga que sirvió a Pepe Díaz para que centrase y rematase defectuosamente Jonathan Sesma, se comprobó que el conjunto blanquiverde estaba dispuesto a dar un pasito más en su preparación o en su "asimilación" de los conceptos, como gusta decir al preparador cordobesista.

Entre los detalles negativos a pulir, posiblemente estén las reiteradas faltas de Agus y Alberto Aguilar (al benamejicense se le ve aún demasiado lento) y los desajustes de Richy. También otro pequeño lunar, éste arrastrado de la temporada pasada. Los deberes de verano para Fuentes están marcados en rojo: 50 centros diarios. Al de la Fuensanta, que en el filial ejecutaba esa acción a la perfección, sigue costándole con los mayores. Los exámenes son en septiembre, ya se sabe.

Pero en lo positivo, que fue lo más, Charles sigue confirmándose como un elemento muy válido por su rapidez. Arteaga fue fundamental hasta el punto de que en una gran jugada suya en el área, yéndose de dos contrarios y sirviendo al brasileño, adelantó a su equipo. A Javi Flores se le ve algo más fino y puede que incluso con un punto más de velocidad. Pepe Díaz hizo de Pepe Díaz y anotó el segundo de los blanquiverdes y Usero debe ser fundamental en el equipo.

El tercer examen de pretemporada para los blanquiverdes, dentro de las lógicas imprecisiones a estas alturas del verano, mostró un Córdoba con mayor ritmo, con más intención de cara al marco rival, con cierta visión para montar los contragolpes y con las ideas más claras en los últimos metros. Eso sí, con fallos de entrega en los últimos metros. Tiempo hay para afinar y aquilatar conceptos. Por lo visto ayer, el Córdoba progresa adecuadamente y aún le faltan tres incorporaciones que deben ser, a priori, de categoría. El horizonte ha mejorado.