La directiva del Lucena CF se está planteando la presentación de un concurso de acreedores ante el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba para evitar el descenso administrativo a Tercera el próximo 31 de julio por impago de las deudas con sus jugadores y cuerpo técnico.

Así lo ha desvelado el directivo Antonio Luis Bergillos, que ha certificado igualmente que el presidente está en conversaciones con un despacho de abogados de Córdoba, especializado en temas mercantiles, para ver los pros y las contras de la presentación del concurso de acreedores, que no solo permitiría mantenerse en Segunda B, sino que serviría para presentar un plan de viabilidad para extinguir la deuda actual, que asciende a 1.154.564,59 euros, según las cuentas presentadas en el Ayuntamiento de Lucena.

De esa deuda, la partida prioritaria para eludir el descenso asciende a 644.000 euros, que corresponde a jugadores y cuerpo técnico, incluyendo los aplazamientos firmados con algunos profesionales de la temporada 08-09, mientras que el resto corresponde a compromisos de pago con Hacienda, Seguridad Social, dos préstamos con bancos, personal laboral del club, acreedores varios y aportaciones dinerarias de algunos directivos.

Según Bergillos, la deuda comienza en la etapa de Jon Ander López al frente del club, que dejó un déficit de 1.141.000 euros, con lo que prácticamente en las dos temporadas de presidencia de Aceituno se ha llegado a estabilizar el capítulo de ingresos y gastos, pero ha sido insuficiente para sanear las cuentas.

El objetivo de la directiva del Lucena es presentar a la mayor brevedad posible el concurso de acreedores para que el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba tenga el tiempo suficiente para el estudio del expediente antes del 31 de julio, porque de lo contrario el descenso administrativo sería inevitable.