El Regal Barcelona ha finalizado la primera fase de la Euroliga con un laborioso triunfo sobre el Monterpaschi Siena (85-70), después de un encuentro de poder a poder en el que ambas escuadras han demostrado que son líderes de sus ligas nacionales y ha presentado sus credenciales al título europeo de esta temporada.

El equipo de Xavi Pascual ha sido el primero en finalizar invicto (10 partidos, 10 victorias) en esta primera fase desde que lo lograse el CSKA Moscú en 2005.

Destacar el gran encuentro de todo el conjunto azulgrana pero, especialmente, el de Ricky Rubio que, con 14 puntos y 10 asistencias -su récord personal en la Euroliga- ha sido el catalizador del triunfo de su equipo, una actuación que fue muy celebrada en el Palau Blau Grana cuando el jugador fue sustituido por Sada a solo 18 segundos para el final, cuando el encuentro estaba más que decidido.

Por otro lado, el Caja Laboral sucumbió en los segundos finales a la calidad del CSKA que, gracias a un triple de Langdon, se hizo con la victoria, 84-83, y el liderato del grupo que le posibilita un Top 16 más accesible. Los vitorianos dispusieron de una última posesión, con siete segundos, que terminó con un triple que fallado por Singletary y que condena al Baskonia a la segunda plaza y ya sabe que en la siguiente fase Olympiacos será uno de sus rivales.

El Caja Laboral jugó un partido con altibajos y sólo la dirección y acierto de Sean Singletary en el segundo tiempo, veinte puntos, le permitió llegar al final del partido con opciones de victoria.

El estadounidense finalizó tras este partido su contrato y está a expensas de que el club decida si cuenta con él, pero ha dejado para el recuerdo su mejor partido con la camiseta baskonista.

Por el bando ruso, Langdon, 21 puntos, fue la pesadilla que impidió el triunfo vitoriano. Además de dar la puntilla con el triple decisivo anotó dieciséis puntos en un tercer cuarto memorable. Siskauskas volvió a mostrar su talento, con 21 tantos, y Khryapa, con 17, fueron los pilares del CSKA.