De la junta actual del Barça saldrán dos aspirantes a suceder a Joan Laporta. Jaume Ferrer, que lo anunció el miércoles y también tiene la misma intención otro vicepresidente, Alfons Godall, que formalizará su intención en cuanto haya perfilado el grupo que le acompañaría. Laporta respeta la decisión de los dos y garantizó que mantendría la equidistancia. "Haré de árbitro", aseguró el presidente. Godall está abierto a pactar con Ferrer, pero descarta hacerlo con Sandro Rosell. "Con Jaume podemos hablar de mil cosas, pero no de cuotas de poder", afirmó Godall, quien ha tenido "la percepción" de que Ferrer compartía, en algunos puntos, ideas comunes con las de Rosell.