Quique Sánchez Flores, entrenador del Atlético de Madrid, llega con el objetivo de "reflotar a un equipo con herramientas suficientes para estar entre los mejores de Europa", en el que, a nivel personal, tiene que estar a la "altura de la historia del club", con un "pensamiento ganador".

En su presentación como nuevo técnico del conjunto rojiblanco, con el que ha firmado hasta final de temporada con opción a una más si entra en Liga de Campeones, admitió que "habría sido incapaz de decir no a la propuesta del Atlético", porque cree en los jugadores de la actual plantilla, y consideró "fundamental recuperar la calidad y el estado emocional de estos futbolistas".

En sus primeras palabras, que incluyeron un recuerdo a su "colega" Abel Resino, al que sustituye en el banquillo del club madrileño.