La crisis económica sigue acumulando cadáveres en el mundo del deporte. BMW, el fabricante de automóviles alemán, se retirará del Mundial de fórmula 1 al final de la actual temporada, por lo que seguirá los pasos de Honda, que también renunció el pasado noviembre. La recesión económica, que ha tenido un fuerte impacto en el sector del motor, es la principal causa del adiós. La escudería BMW-Sauber cierra su ciclo en la fórmula 1 después de los decepcionantes resultados del alemán Nick Heidfeld y el polaco Robert Kubica que, en teoría, debían luchar por estar arriba en el Mundial durante esta temporada, pero lo cierto es que están muy distanciados.

Los responsables de BMW reconocieron el fracaso deportivo. "Conseguimos consolidarnos como una escudería puntera, pero lamentablemente no hemos cumplido las expectativas", dijo Klaus Draeger, responsable de desarrollo del consorcio. "La decisión ha sido difícil, pero es un paso consecuente con nuestra nueva estrategia, que se define por un refuerzo de la sostenibilidad y la ecología, en lo que queremos ser modélicos", justificó el presidente Norbert Reithofer. El adiós de BMW no sorprendió a la FIA, que lo asoció a la crisis económica mundial. Más afectado se mostró Heidfeld. "Esa decisión es para mí absolutamente inesperada" dijo el piloto alemán.