La sueca Sarah Sjosrom batió por segunda vez en dos días el récord del mundo de los 100 metros mariposa con sólo 15 años. Nacida el 17 de agosto de 1993, la nadadora nórdica se proclamó campeona del mundo de esa distancia con 56.06 por el registro que estableció el domingo, 56.44, en las semifinales, para batir a la australiana Jesicah Schipper, plata con 56.23, y a la china Liuyang Jiao, bronce.

En el segundo día de competición, en la piscina del Foro Itálico de Roma, siguió el goteo de récords del mundo que comenzó ayer con seis. Ayer cayeron cinco. Además del de los 100 mariposa, el de los 100 braza masculinos, en cuya final el australiano Brenton Rickard estableció un 58.58 para quitárselo al campeón olímpico, Kosuke Kitajima, que lo tenía desde los Juegos Olímpicos de Pekín en 58.91.

La estadounidense Rebecca Soni pudo con el de los 100 braza femenino. Estaba en 1:05.09 en poder la australiana Leisel Jones desde los Mundiales de hace dos años en Melbourne y ayer Soni hizo 1:04.84. La rusa Yuliya Efimova paró el crono en 1:05.84 para ser medalla de plata y la australiana Sarah Katsoulis en 1:06.23 para ganar el bronce.

La rusa Anastasia Zueva hizo lo propio en los 100 espalda con un tiempo de 58.48 para bajar de la tabla de récords el de la zimbabuense Kirsty Coventry, vigente desde Pekín, en 58.77.

La estadounidense Ariana Kukors batió su mejor marca mundial de nuevo ayer tras haberla establecido en las semifinales de los 200 estilos. La americana hizo 2:06.15 cuando tenía 2:07.03.

Entre los españoles, Aschwin Wildeboer y Villaécija pasaron a las finales de 100 espalda y 1.500 libres, respectivamente.