El base español Ricky Rubio, elegido la pasada madrugada contra todo pronóstico con el número cinco por los Timberwolves de Minesota en el sorteo de la NBA en Nueva York, dejó abierta la puerta a volver a jugar en España al menos durante un año más.

"Ahora no descarto para nada volver a España", dijo Rubio una hora después de conocer que, a primera vista y a falta de que se hable de traspasos, su futuro en la liga profesional de baloncesto de Estados Unidos pasa por el equipo de Minesota, un destino que no se encontraba entre sus predilecciones.

El olímpico español, de 18 años, aseguró, en un encuentro con periodistas en el Madison Square Garden de la Gran Manzana, que los Timberwolves, un conjunto que a día de hoy no tiene entrenador para la próxima temporada, se han mostrado dispuestos a esperarle "un año", según le ha informado su agente.

"Yo no hablé con ellos, por lo tanto no tengo la necesidad de venir. El equipo me ha dicho que me esperaría un año y vamos a ver si vengo el año que viene o no", subrayó Rubio.

En caso de que en los próximos días decida volver a España, Rubio se mostró seguro de que lo haría para jugar con su actual club, el Joventut de Badalona (Barcelona), con el que mantiene, sin embargo, un litigio para rebajar su actual cláusula de rescisión, valorada en 4,7 millones de euros.

"Por supuesto que será en Badalona. Como he dicho siempre, mi casa es Badalona y, si tengo que volver, muchas opciones las tiene Badalona", explicó el catalán, que, pese ser seleccionado por debajo del tercer o cuarto lugar que los expertos le auguraban, es el segundo español mejor situado en la historia del sorteo, por detrás de Pau Gasol.

El año que Rubio se plantea seguir jugando en la ACB, la máxima competición de baloncesto en España, le daría el tiempo necesario para solucionar los problemas que le enfrentan al Joventut y encontrar un camino que le permita jugar en la NBA con menos problemas económicos: "La NBA es muy atractiva, pero si tú no quieres estar en el equipo que hay por el momento, pues puedes esperar", insistió Rubio, quien aseguró que "ahora el trabajo es de los agentes" y quien, sin embargo, también comentó que, a la postre, "Minesota no es una mala idea".

Según recordó, aunque no se encontrara entre sus lugares favoritos en los que jugar, los Timberwolves de Minesota "no dejan de ser un equipo de la NBA y eso es lo máximo".

"Es sorprendente que, además de mí, escojan a otro base, pero vamos a ver qué quieren ellos y lo que pasa", se sorprendió Rubio en referencia al hecho de que los Timberwolves eligieran, en sexto lugar, a otro base, Jonny Flynn.

Si se decide a volver a España jugará en el Joventut Minutos después, el mismo equipo seleccionó a un tercer base, Ty Lawson, para la próxima temporada, con lo que no quedó claro cuál sería el papel de esos tres jugadores en un mismo equipo.

La selección de Rubio en quinto puesto causó cierta sorpresa ya que se esperaba que fuese elegido antes por los Thunder de Oklahoma (que seleccionaron al escolta James Harden) o los Kings de Sacramento (que se decidieron por el base Tyreke Evans, de 19 años, formado en la Universidad de Memphis).

"La verdad es que los Kings de Sacramento me querían mucho y me hice esa idea", reconoció el español, quien, en los últimos días, estuvo en contacto con ese equipo de California, adonde se desplazó para ofrecer una demostración al equipo técnico de la entidad.

Se espera que Rubio alargue su estancia en Nueva York para decidir, junto a sus padres, que lo acompañaron en el sorteo, y a sus agentes, si la próxima temporada conocerá las canchas de Estados Unidos o volverá a jugar en las españolas que tan bien conoce.