El Barcelona se encuentra desde ayer en Los Angeles para competir en un cuadrangular con tres equipos de la NBA. El Barça se medirá mañana con los Lakers de Pau Gasol, y pasado mañana con los Toronto Raptors o Los Angeles Clippers. Lo que hace una década parecía inimaginable ahora se vive con normalidad: un club europeo y otro de la NBA midiendo sus fuerzas.

Para algunos se trata solo de un partido de exhibición, dentro del American Tour de la Euroliga, que será el reencuentro entre dos amigos, Juan Carlos Navarro y Pau Gasol. Para otros, es un paso más en el acercamiento entre dos mundos condenados a encontrarse.

¿A alguien le extrañaría un Barça-Lakers oficial en un futuro cercano? Hace ya más de seis años que el comisionado de la NBA, David Stern, insinuó una posible expansión de la liga estadounidense con uno o varios equipos asentados en Europa. Lo hizo en una conferencia de prensa antes del All Star del 2002. "No es solo una idea, estamos trazando un plan para llevarlo adelante en cuatro o cinco años". El presidente del Madrid, Ramón Calderón se atrevió incluso a ponerle fecha: el 2009, asegurando que el Madrid sería uno de los equipos de esa liga. El tiempo lo ha dejado en evidencia.