Joachim Löw, el seleccionador nacional de Alemania, aseguró ayer que si los españoles "logran adelantarse en el partido, entonces será más difícil derrotarles". "Será un partido muy difícil", anunció el técnico alemán tras la victoria de España ayer ante Rusia (0-3) . "Jugadores como Iniesta y Fábregas que cambian su posición continuamente, son muy difíciles de predecir", analizó Löw. Para el técnico alemán "no juega ningún papel si se tienen tres o cuatro días de descanso", en relación a la jornada de pausa que Alemania aventaja a España. "Aparte de eso --dijo Löw-- los españoles tampoco se han tenido que dejar hoy tanta energía".

Mientras tanto, el alemán medio tenía claro ayer, aún antes de conocerse, cuál era su rival soñado para la final: España, según el resultado de una encuesta no representativa y a pié de cafetería realizada por un periodista de Efe . "Yo me pedí España hace semanas, no es cosa de ahora, en el último minuto. Mire, mire", afirmó Manfred, un funcionario que toma su café con pasta en la mantequería Lindner, vecina a la Puerta de Brandeburgo.