Ayer avanzamos las tarjetas que había recibido el Córdoba en los 25 partidos que se llevan disputados de liga en la actual temporada. Hoy, lo que le cuesta por la gran cantidad de sanciones y que sitúan al conjunto cordobesista en el último puesto de la clasificación del Juego Limpio.

La cantidad total que el Córdoba ha desembolsado --aunque la realidad es que se lo descuentan de lo que debe de percibir por las quinielas-- asciende a 13.512 euros, entre jugadores y cuerpo técnico. A ello hay que sumar los 3.900 euros de multa al club por incidentes de sus seguidores.

El baremo establecido por la Federación Española para aplicar las sanciones establece que una tarjeta amarilla supone 60 euros; dos amarillas con roja, 120 euros al jugador y 90 al club, mientras que la roja directa le cuesta 601 euros al club y 90 al jugador.

La palma en amonestaciones y sanciones se la llevan Ito y Pablo Ruiz. El primero ha sido castigado con 1.802 euros, al igual que el sevillano, que tiene un debe de 1.742 euros. Eso se debe a las dos expulsiones que han sufrido y que hacen que sus números particulares se disparen.

Excepto Mario y Javi Flores, todos los demás jugadores cordobesistas han sido sancionados. Pero lo más llamativo de todo es que hasta en nueve ocasiones han dejado a su equipo en inferioridad numérica --Málaga, Tenerife, Las Palmas, Xerez, Numancia, Celta, Nástic, otra vez Málaga y Sevilla Atlético--.

La tensión no solo ha estado en el terreno de juego, también en el banquillo. Paco Jémez, con 1.442 euros de multa, ha sido expulsado en dos ocasiones --Málaga y Xerez-- y amonestado en una ocasión, la semanada pasada en el Sánchez Pizjuán. Estando en el banquillo han sido expulsados dos jugadores, Antonio y Fernando. El defensa recibió la tarjeta roja en el túnel de vestuarios, al finalizar el partido con el Hércules; el portero del filial, que fue convocado por la lesión de Julio Iglesias, tampoco se libró porque le fue mostrada la roja directa en el choque contra el Polideportivo Ejido.

En el abono de estas cantidades hay cierta controversia. Ha habido años en que el club se las ha desquitado a los jugadores a la hora del finiquito. Sin embargo, en otras temporadas ha sido la entidad la que ha acarreado con todos los gastos.

Pero aquí no se quedan las cantidades. También el club ha sido objeto de sanciones. Hasta en tres ocasiones. La primera, en el partido contra el Ejido, que se saldó con 600 euros por el lanzamiento de "40 botellas de plástico"; la segunda, contra el Hércules. Nada menos que 3.000 euros por idéntico motivo y por la suspensión del encuentro.

La última, y quizás la más sorprendente, fue la recibida con un castigo de 300 euros por salir el Córdoba al terreno de juego cuatro minutos después de que lo ordenara el árbitro.