El español Fernando Alonso (McLaren-Mercedes), que el domingo se juega el título mundial de Fórmula Uno con su compañero de escudería, el británico Lewis Hamilton, y con el finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari), declaró hoy en el circuito de Interlagos, escenario del Gran Premio de Brasil, que tiene confianza en su equipo. La presencia este fin de semana de un observador de la Federación Internacional (FIA) en el garaje de McLaren-Mercedes para velar por la igualdad de oportunidades entre sus dos pilotos es, a juicio de Alonso, algo innecesario. "No estoy de acuerdo con la decisión de que haya un observador de la FIA en el 'box' del equipo. No necesitamos tenerlo. Confío en mi equipo".

"Tras el Gran Premio de China dije que no tenía confianza porque estaba muy disgustado con el resultado de la tercera ronda de la sesión de clasificación y sobre todo al ver que la presión de los neumáticos era algo elevada. Pero luego comprobé que fue una casualidad y algo de mala suerte", dijo Alonso en la conferencia de prensa oficial de la FIA. Al referirse a la declaraciones tras el Gran Premio de China de su jefe, Ron Dennis, quien dijo que el equipo y Hamilton luchaban contra Alonso, no contra Raikkonen, que fue el ganador de la carrera, el español comentó: "Al principio me sorprendió, pero siempre hay que analizar el contexto en el que se dicen las cosas. Personalmente no vi nada raro ni extraño. No me preocupé".

Alonso también se refirió a su relación con Hamilton, y dijo: "Se dicen muchas cosas de nosotros que no son verdad. Somos dos pilotos que luchamos en la pista, pero fuera de ella tenemos una buena relación desde el primer día". "Si la gente nos ve sólo los sábados de gran premio, cuando el equipo abre las puertas para la prensa, la situación no parece muy relajada entre ambos, pero es porque acaba de disputarse la sesión de clasificación y estamos pensando en el resultado, en la carrera del día siguiente, en la estrategia. Por eso puede parecer que no es una situación relajada", afirmó.

"Estamos en una competición y ambos amamos competir; es nuestra vida. Y los dos disfrutamos de esta batalla. Somos diferentes, pero en cada premio disfrutamos de la competición", añadió Alonso, que durante toda la conferencia de prensa se mostró afable, bromista y sonriente con su compañero y rival. Sobre el Gran Premio de Brasil, en el que se decide el título, el español dijo: "Los dos últimos años llegué aquí siendo el líder del campeonato y sabía que en la carrera tenía que ser conservador para sumar los puntos que necesitaba. Ahora es diferente y más difícil porque tengo que tratar de ganar y asumir más riesgos".

"Lo cierto es que el domingo tengo que arriesgar, eso es seguro, aunque lo fundamental es terminar la carrera porque no dependo sólo de mí", dijo. "Se puede decir que el circuito de Interlagos me trae suerte. Me gusta este sitio porque me trae muy buenos recuerdos, y espero seguir teniendo esos buenos recuerdos cuando acabe la carrera del domingo", agregó.

"Hace cuatro o cinco carreras me centraba cada fin de semana en tratar de ganar la carrera. Ahora afronto ésta sabiendo que el título es el objetivo", comentó Alonso. Alonso no sabe si, en el caso de proclamarse campeón el próximo domingo, puede considerar este título como el más difícil de conseguir: "Es difícil decirlo. El año pasado también fue un final de temporada muy difícil y al ganarlo tuve una sensación muy especial. No puedo decir si éste título sería más o menos duro".