Fue Francisco Ginés Martínez, uno de los mejores --si no el mejor-- reumatólogos que pisa esta ciudad, quien me dijo hace ya algún tiempo que la capacidad de olvido es la más trascendental con la que cuenta el ser humano. Por eso me quedo con ese regusto final en Tenerife. Hoy espero ver a ese Córdoba, con esas mismas sensaciones, y que todo acabe, al fin, con un triunfo que será reconfortante.