Más de 2.000 agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, cinco helicópteros y veinticuatro embarcaciones, entre ellas tres fragatas de la Armada, se ocuparán de la seguridad durante la Copa del América que se celebrará en Valencia, lo que supone un despliegue superior al de la visita del Papa del pasado año. El dispositivo, el mayor que se ha desplegado hasta el momento en la Comunitat, comenzó a gestarse en diciembre de 2003, un mes después de la elección de Valencia como sede, con una primera reunión entre las tres administraciones públicas implicadas en este acontecimiento, uno de los de mayor repercusión internacional en el ámbito deportivo.

Desde entonces, y tomando como referencia las regatas previas al desafío final celebradas en aguas de Valencia, el Ministerio del Interior, la Generalitat, el Ayuntamiento y la entidad organizadora (ACM) han diseñado un blindaje compuesto por sofisticados medios tecnológicos de prevención y actuación, y un notable despliegue de agentes. Según explicó el delegado del Gobierno, Antoni Bernabé, el recinto portuario estará vigilado las veinticuatro horas del día por doscientas cámaras, micrófonos de escucha, barreras de infrarrojos, y sistemas de detección volumétrica. Asimismo, los controles de acceso para vehículos contarán con un dispositivo que, no sólo detecta la presencia de explosivos, sino que permite saber incluso si se han manipulado en el interior del mismo.

Coordinación de distintos cuerpos

Entre los equipos más avanzados, destaca también un sonar que alertará de cualquier intromisión submarina en la franja marítima establecida como zona de seguridad. Del total de 2.000 agentes, quinientos pertenecen a la Policía Local, y el resto al Cuerpo Nacional de Policía, a la Guardia Civil, la Armada, la Marina Mercante y a la seguridad privada de ACM. En concreto, la Armada pondrá disposición de la competición deportiva cuarenta efectivos, tres embarcaciones -entre ellas un buque cazaminas-, un helicóptero y un equipo de desactivación de explosivos.

A estos medios se unirán cien efectivos de Salvamento Marítimo, que desplegarán un plan de emergencia específico con el buque de salvamento "VB antártico", dos embarcaciones, un helicóptero y una barrera acuática de anticontaminación de un kilómetro de longitud. Por su parte, la Guardia Civil aportará 412 agentes, diecisiete embarcaciones, dos helicópteros con equipos de transmisión y grabación de imágenes, remolcadores submarinos, focos de luz de gran potencia y radioteléfonos de banda marina, entre otros elementos. Asimismo, un total de 910 agentes dedicados a la seguridad en el recinto portuario y otros actos multitudinarios, dos helicópteros y una embarcación, constituirán la contribución del Cuerpo Nacional de Policía.

Además de esta vigilancia, la Policía Nacional desplegará Brigadas de Información, de Policía Judicial y Extranjería, y reforzará la atención al público en la oficina de denuncias y en la Unidad de Gestión.

Todo este dispositivo será controlado desde el Centro de Coordinación Operativa (CECOR) de la Copa del América, constituido desde el pasado 24 de marzo en el puerto de Valencia, día en el que empezó la denominada "fase precrítica". La detención de un etarra en Girona que portaba documentación sobre las infraestructuras de la competición para la supuesta preparación de atentados no ha alterado el programa de seguridad, que según subrayó el delegado del Gobierno, ha sido diseñado para combatir "cualquier amenaza terrorista" y mantener una "permanente alerta".