Fernando Morientes, delantero del Valencia, que se produjo una luxación en el hombro derecho el pasado miércoles durante el encuentro entre España e Islandia, permanecerá esta semana en reposo y la próxima entrenará con una protección para intentar estar en condiciones de jugar ante el Chelsea en Mestalla.

Al internacional español, al que en un primer momento le diagnosticaron los servicios médicos de la Federación Española que estaría entre tres y cuatro semanas de baja, le realizaron hoy una resonancia magnética para determinar el alcance exacto de su lesión.

Según informaron los servicios médicos del Valencia, Morientes "permanecerá esta semana en reposo e inmovilización, para comenzar la próxima semana con los entrenamientos con un sistema de protección en el hombro, valorando en ese tiempo la posibilidad de entrar o no en competición", explicaron.

El futbolista ya se mostró optimista ayer a su llegada a Valencia respecto a la posibilidad de poder enfrentarse al Chelsea en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones que se disputará en Mestalla el próximo día 10 de abril.

Además, el cuerpo médico se plantea la posibilidad de que al delantero le practiquen una intervención quirúrgica como tratamiento definitivo a esta lesión al final de esta temporada.