En septiembre de 2002, Manolo Preciado cumplió lo que el mismo definía como "el sueño de mi vida": entrenar al club de su tierra, el Racing de Santander. Esa responsabilidad conllevaba además hacerse cargo de la última joya de la cantera cántabra, Pablo Sierra, quien había debutado en el primer equipo la temporada anterior. El donostiarra Txiki también formaba parte de aquel plantel. Pero a Preciado el sueño le duró cinco meses. La irrupción de Dimitri Piterman acabó con la estancia de Sierra y del técnico en el Racing. Al concluir la temporada, Txiki también tuvo que hacer las maletas.
Dos años después, entrenador y jugadores se reencontrarán en La Condomina, en el duelo entre colista y vicecolista de la Segunda División. Preciado, quien ya advirtió de la peligrosidad de un Córdoba que "sólo por algunas circunstancias está abajo", prestará especial atención al juego del pequeño extremo cántabro. Y es que el mismo reconoce que "Pablo Sierra es mi debilidad". Y no sólo eso: "Ya le quise fichar el año pasado en Levante, y para esta temporada era una de mis prioridades". Sin embargo, el escaso interés del Córdoba en desprenderse del jugador y el interés del Mallorca por el blanquiverde frustraron el pase.
Preciado, sin embargo, dice desconocer las razones del intermitente rendimiento de su ex pupilo en la capital califal, aunque no ha perdido la fe en el jugador: "Si pudiera lo tendría mañana en mi equipo". El técnico pimentonero dice tener la clave para sacar del cántabro su mejor fútbol puesto que "conozco su carácter, sé como es y la manera de que rinda mejor", dice el técnico del Murcia de un jugador que "incluso dormido sigue siendo de Primera División". Pablo Sierra, por su parte, también vivirá el choque de un modo especial, y aunque reconoce que le "sabrá mal", admite con una sonrisa que "no tendré más remedio que robarle los tres puntos".
TXIKI, MAS DE LO MISMO" Para el donostiarra Txiki, que participó en la mitad de los 18 encuentros que duró Preciado en Santander, el técnico tiene casi tantos elogios como para Pablo Sierra. "En el Racing Txiki compartió titularidad con Mario Regueiro, internacional por Uruguay y un jugador de alto nivel", recuerda, y señala "la velocidad, la técnica y el desparpajo" como las principales cualidades del zurdo blanquiverde. "Ellos dos", reflexiona Preciado, "son un par más de los grandes futbolistas del Córdoba que por un motivo u otro no acaban de rendir: Pulpo González, Bilic, el año pasado Olivera...".
