AYAMONTE: Javi Lama, Pin, Aguado, Ulises, Quevedo, Alberto Ponce, Miguel, Caro, Gallinato, Víctor y Dani. También jugaron Edu, Manolo, David López, Jacobo y Pachón.

CORDOBA: Jáuregi, Larrainzar, Selu, Juanmi (Víctor, 82´), López Ramos, Francisco (Oscar Pérez, 56´), Montenegro (Sarmiento, 56´), Pablo Sierra (Guirado, 74´), Txiki, Villa (Bilic, 46´) y Silvio González (Armentano, 64´).

GOL: 0-1 (1´) Juanmi a centro de Montenegro.

ARBITRO: Muñoz Ballestero, de Huelva.

INCIDENCIAS: Segundo encuentro de preparación correspondiente a la vigésima edición del trofeo Antonio Concepción.

El Córdoba consumó su primera victoria de pretemporada al derrotar al Ayamonte por un solitario gol de Juanmi y no mejorando la actuación del pasado miércoles contra el Cartaya. Los blanquiverdes volvieron a poner de manifiesto que están muy lejos de su mejor momento y los fallos en los pases y las pérdidas de balón marcaron la pauta de un choque en el que muy pocas cosas positivas podrá extraer Esteban Vigo, ya que el juego al menos en lo que respecta de medio campo en adelante dejó mucho que desear, pese a que enfrente tuvieron a un equipo de Regional Andaluza, que lo único que puso fue voluntad y algo de sentido.

Esteban Vigo puso de inicio a un equipo con jugadores que militaron la pasada campaña, excepto Selu. Por lo que se ve la columna vertebral sigue de la campaña pasada y sigue estando presente, si bien es cierto que en el banquillo se quedaron hombres nuevos y a los que el técnico le da minutos buscando rotaciones en estos primero compases.

Pero las ideas estuvieron nubladas en todo momento en la mente de los blanquiverdes. Una cosa es que tengan las piernas agarrotadas, que lleven mucho cansancio acumulado, pero también es cierto que algo de la calidad que poseen deben sacar cuanto antes, algo que desde luego ayer sólo lo hicieron en contadísimas ocasiones.

El único gol del partido se consiguió en el minuto 1. En la primera jugada de ataque, Juanmi cabeceó un buen centro de Montenegro. En los seis minutos siguientes pudo marcar el Córdoba hasta en tres ocasiones, pero falló en el remate final. Y ahí comenzó el choque a entrar en una fase en la que no se sabía muy bien a qué jugaba. Incluso durante bastante tiempo le cedió el dominio a los jóvenes jugadores locales que a fuerza de voluntad no tenían el acierto necesario para poner en aprietos a Jáuregi.

Si mala fue la primera mitad, peor fue la segunda. Salvo dos remates iniciales de Bilic, poco más es digno de reseñar. El Córdoba no se acopló y siguió corriendo pero sin acierto, perdiendo muchos balones y errando continuamente en los pases a lo largo del partido.