La renovación de López Ramos es un caso que parece haber quedado resuelto. Así lo dejó caer ayer Enrique Orizaola después de reunirse con el representante del jugador, Rafael Rodríguez Rafita , aunque éste no e mostraba tan convencido y señaló estar "bastante optimista".

Según el presidente cordobesista, "todo está resuelto a falta de pequeños flecos", que considera "tan poco importantes" para que la operación no se pueda hacer efectiva esta misma semana.

Las posturas, eso sí, están muy cercanas. El jugador ha accedido a renunciar a parte de sus exigencias económicas a cambio de un año más de contrato.

El Córdoba ofreció a López Ramos dos años de contrato y un tercero que se ejecutaría en el caso de que alcanzase un número de partidos jugados, así como un 20% de subida salarial con respecto a lo que cobra esta temporada. El jugador contrarrestó pidiendo cuatro años y una subida superior a la recibida.

En la reunión de ayer, Orizaola y Rafita mostraron su flexibilidad. Al final, la última oferta que recibió el agente fue tres años de contrato, más un cuarto año dependiendo del número de encuentros que juegue en las tres campañas, calculados en 25 por cada una de ellas.

Ahora todo en manos de López Ramos, que será el último en decidir, si bien todo hace indicar que al final acabará por aceptar esta última propuesta. El jerezano ha declarado en repetidas ocasiones que su primera opción es el Córdoba y su propio representante lo volvió a decir ayer, señalando también que "tiene otras ofertas".

Otra de las cuestiones que tendrá bastante peso en la decisión final del jugador será el hecho de que se siente muy bien valorado desde el club.