La muerte de José María Chava Jiménez, fallecido la noche del viernes en Madrid de un paro cardiaco, ha conmocionado al pelotón ciclista español, en el que siempre se recordará su buen humor y el carácter de luchador que le hizo ganarse a la afición.

El corredor, que llevaba dos años retirado del ciclismo por una depresión, murió en la clínica psiquiátrica San Miguel como consecuencia de un paro cardiaco y posteriormente fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de la capital para practicarle la autopsia.

EN EL TANATORIO

El cuerpo de Jiménez fue velado después en el Tanatorio Sur de Madrid pasado este mediodía y allí permaneció hasta las 15.00 horas, momento en que el cortejo fúnebre emprendió camino hacia El Barraco (Avila), donde nació el 6 de febrero de 1971 y donde hoy por la mañana se oficiará un funeral antes de su entierro.

Familiares y algunos compañeros acompañaron el cuerpo del Chava , que desde 1992 fue profesional en el equipo Ibanesto.com, con el que ganó cuatro etapas de la Vuelta a España 1998 y quedó tercero en el general.

El abulense, casado con Azucena Sastre, hermana del también ciclista Carlos Sastre, y sin hijos, se coronó tres veces rey de la montaña en la ronda española y fue uno de los escaladores más carismáticos del ciclismo español. Con 28 victorias, 21 de ellas en las cumbres, Jiménez se retiró del ciclismo a los 31 años por una depresión.

Pese a que en el pelotón se conocían los problemas de salud del Chava el ciclismo español ha sufrido un golpe tremendo con la noticia de su muerte.