El Atlético Lucentino dio el pasado domingo un paso atrás en sus aspiraciones de ascenso a Segunda División B. La derrota en casa frente al Don Benito, la segunda consecutiva contra este equipo extremeño, ha dejado al club de Lucena con remotas opciones de ascenso. Para el presidente del Atlético Lucentino Juan Antonio Guardeño, la liguilla está "difícil, pero no imposible. Como se suele decir mientras haya vida existe esperanza y nosotros nos vamos a agarrar a cualquier posibilidad que tengamos por mínimas que sean. Lo que tengo claro es que el equipo va a seguir peleando e intentando ganar los tres próximos partidos empezando por el que jugamos en Tomelloso" aseguró.

Siendo realistas, la Segunda División está casi imposible, aunque el presidente de la entidad lucentina siempre piensa desde el lado positivo, "el primer puesto está complicado pero también podemos ser segundos y pensar en posibles rebotes".

Desde el palco, Juan Antonio Guardeño está viendo al equipo jugando "jugando fenomenal. En la liguilla hemos jugado tres buenos partidos pero la suerte nos fue esquiva en jugadas muy determinantes. No entiendo como el Don Benito nos ha ganado en la doble confrontación cuando no han sido mejores que nosotros. Creo que merecimos un mejor resultado" afirmó.

Después de llegar al ecuador de la fase de ascenso, los jugadores del Lucentino "se encontraban hundidos en el vestuario", dijo Guardeño.