La producción operística que en la noche de este viernes se ha podido disfrutar en el Gran Teatro de Córdoba ha levantado al público de sus butacas para aplaudir una Aida que impresionó al respetable, tanto por su escenografía como por la calidad de las voces y los músicos ante la partitura de Verdi.

Carlos Domínguez-Nieto, exdirector titular de la Orquesta de Córdoba, se puso por última vez al frente de la formación, despidiéndose así de su público. Por su parte, la cordobesa Lucía Tavira atrajo toda la atención en su papel protagonista.