Diario Córdoba

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OBITUARIO

Adiós a Carmen Blanco, baluarte musical de Córdoba

"Amaba la música, la enseñanza, sus coros, su orquesta. Ella es una institución más de nuestra cultura cordobesa"

Carmen Blanco. CÓRDOBA

Se nos ha ido nuestro baluarte musical de la ciudad. Un auténtico archivo de vivencias, emociones, ternura y cariño que desembocan en música. Carmen Blanco fue, para todos los que nos dedicamos a la música en Córdoba, un referente en nuestras vidas. Fue ese impulso lleno de ternura y pasión que necesitábamos para seguir. Su vida estuvo llena de grandes encuentros: en Salzburgo compartimos Universidad, el Mozarteum, con más de 50 años de diferencia. Ella encontró allí a Karajan o Teresa Berganza.

Más tarde tuvo un encuentro especial con la gran Conxita Badía, gran soprano y maestra. Con la que mantendría una relación durante muchos años. E incluso Montserrat Caballé, después de una vocalización le espetó: «Señoras y señores, aquí tenemos una SOPRANO con mayúsculas».

Siempre recordaré cuando, hace algo menos de dos años, pude acercarme y estar con ella una mañana estupenda junto al pianista Andrés Cosano: cantamos para ella, nos contó sus vivencias, nos reímos, comimos.

Pero el momento más emocionante sin duda fue cuando comencé a cantar ‘La adelfa’ de su querido Ramón Medina, escrita originalmente para ella.

"Carmen Blanco fue, para todos los que nos dedicamos a la música en Córdoba, un referente en nuestras vidas"

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Carmen recobró un brillo especial en sus ojos y comenzamos a cantarla a dúo, regalándonos uno de los momentos más bellos y emocionantes que recuerdo de mi vida musical.

Hace unos días tuve la suerte de recibir su despedida antes de partir: «Pablo sigue haciendo música, sigue queriéndola mucho, nunca es suficiente. Sé feliz».

Amaba la música, la enseñanza, sus coros, su orquesta. Ella es una institución más de nuestra cultura cordobesa

Hoy nos falta algo a todos en nuestras vidas. 

Gracias Carmen por regalar tanto a nuestra ciudad, a la música y todos los que estuvimos cerca de ti. Yo solo puedo pensar que ahora eres parte de una música... sin comienzo, ni fin...

(*) El tenor cordobés Pablo García-López es una de las jóvenes promesas del mundo lírico.

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