Dónde la realidad y dónde la ficción... eterna pregunta que se puede hacer el lector o el espectador de una obra, donde el autor juega con detalles autobiográficos y situaciones imaginadas, aunque cada vez son más los textos que al iniciarse arrancan con la recurrente frase: basada en hechos reales. No es el caso que hoy nos ocupa, precisamente.
Pues bien, siempre habrá quien diga que toda obra de ficción es pura autobiografía y que todo texto (literario, cinematográfico...) que intente plasmar los más objetivamente una realidad está abocado al desastre del subjetivismo de quien lo firma. En fin, que Engaño (título del libro de Philip Roth y, a su vez, traducción del original: Tromperie) es bastante más ambiguo y sugerente que Fantasías de un escritor, opción que se ha escogido para la versión española, y donde al espectador se le da todo mascado, en forma de spoiler, sin margen para sospechar durante lo que dura el relato, revelándole cuanto era necesario ocultar.
Pues bien, Arnaud Desplechin (director francés responsable de una docena de títulos en su interesante filmografía) nos introduce en el estudio de un escritor (Denis Posalydès) donde toma notas para su próxima novela y, a la vez, se cita con sus fantasmas personales en forma de mujeres que han pasado por su vida al margen del matrimonio. ¿Infidelidades o fantasías? Esa es la cuestión... su esposa (Anouk Grinberg) lo tiene claro.
Conversaciones con su amante más fiel (Léa Seydoux, muy bien como siempre y desde que muchos la descubrieran en La vida de Adèle) donde se confiesan y profundizan en sus vidas, la antigua amiga gravemente enferma (Emmanuelle Devos), hasta su representante y amigo que desconfía de un affaire con su mujer. En fin, todos y cada uno de los personajes dialogarán con mayor o menos efusividad, cariño, sensualidad o tristeza con este alter ego del famoso escritor que deslumbró a tantos lectores con su obra (entre los que me incluyo) y que tantas veces ha sido adaptado a la gran pantalla con un éxito discutible.
