Adaptación cinematográfica de la novela escrita por William Lindsay Gresham, que ya fue filmada en 1947 por Edmund Goulding, con Tyrone Power como protagonista. Guillermo del Toro da así un giro hacia el género negro desde el fantástico, donde estaba ubicada su filmografía. Realiza una película impecable en su factura técnica, con una muy hermosa fotografía de Dan Laustsen, donde cada plano está muy estudiado y con una duración de 150 minutos que no se hace larga.

El protagonista de esta cinta es un tipo sin escrúpulos, ambicioso, encarnado en Bradley Cooper (en un papel muy alejado del que hizo en Ha nacido una estrella), un desubicado que vive la vida según le llega aprovechando cualquier oportunidad, enrolándose como ayudante en una barraca de feria donde vivirá entre personajes de lo más peculiar, como salidos del emblemático filme La parada de los monstruos (Tod Browning, 1932). En este mágico entorno conocerá y se pondrá a las órdenes del domador de engendros, almas perdidas, que interpreta Willem Daffoe. También se acercará a la pareja que conforman Toni Collette y David Strathaim, lectores de mentes, para aprender a deslumbrar al público con sus artimañas.

Pero quien quedará deslumbrada por él y le seguirá abandonando su mundo, para ser su ayudante, será la encantadora conductora de corriente eléctrica que construye Rooney Mara. Pero la verdadera mujer fatal con quien se asociará no será otra que la psiquiatra interpretada por la elegante y magnética Cate Blanchett, cuyos archivos de pacientes millonarios servirán como fuente de información a este timador capaz de cualquier cosa por conseguir un buen puñado de billetes.

Nightmare Alley puede que sea la producción más ambiciosa y realista de su autor, y no por ello ha perdido el lirismo que le caracteriza, haciendo convivir lo más inquietante y oscuro con una poética muy personal que entronca con su obra precedente. Mención especial merece la banda sonora original de Nathan Johnson, ideal para introducirnos en este misterioso relato de traiciones e ilustrar con sentido y sensibilidad esta historia sobre la crueldad del ser humano.