Dentro de unos días se celebrará en nuestra ciudad una nueva edición del consagrado e internacionalmente reconocido Festival de Piano Rafael Orozco. Juan Miguel Moreno Calderón, que con tanto entusiasmo dio vida y ha venido impulsando este prestigioso festival nacido en 2002, nos cuenta cómo por el mismo han pasado ya más de doscientos artistas, participando los grandes pianistas de mayor renombre en el panorama nacional e internacional, que cada año rinden así homenaje a la insigne figura del pianista cordobés Rafael Orozco, a cuyo nombre está rotulado nuestro Conservatorio Superior de Música de Córdoba. De nuestro Rafael Orozco ya se ha dicho y escrito profundamente y con autoridad, por lo que ante esta próxima edición del festival solo cabe volver a evocar su virtuosismo y pasión musical, pues era Orozco un pianista puro y profundo, al tiempo que esencialmente pasional y romántico, que como se viene diciendo, ganaba muchísimo en vivo porque se entregaba intensamente en cada concierto.
Como consecuencia de esa apoteosis de emoción y bravura musical con las que hacía vibrar al auditorio, es fácil comprender que Rachmaninov o Iberia, de Albéniz, fuesen puntos culminantes del legado de Orozco en el ámbito discográfico, junto a brillantes interpretaciones de Chopin, Schumann o Liszt, con las que desplegaba su más expresiva fantasía y nobleza musical, riqueza de color y agilidad de ejecución. Supone todo un privilegio contar con esta enorme figura que forma parte de nuestro más sublime patrimonio musical. Su virtuosismo de raza y su genuina esencia andaluza al piano se encuentran inscritas con letras de oro en la historia de Córdoba.
