En un recóndito rincón del municipio malagueño de Ardales, una espectacular gruta subterránea ha protagonizado uno de los debates más apasionantes de la historia del arte. En unas salas más bien resguardadas de la cueva de Doña Trinidad, unas llamativas marcas rojas adornan las imponentes estalagmitas que bajan del techo. ¿Pero son estas líneas rojizas fruto de procesos naturales o han sido creadas por alguien? Un nuevo estudio liderado por la Universitat de Barcelona (UB) concluye que estas huellas, datadas entorno a los 65.000 años, son "sin lugar a duda" obra de una actividad humana. Esto supondría, pues, que estamos ante la pintura humana más antigua hallada hasta la fecha. Los 'brochazos' más antiguos de nuestra especie.

Un análisis del pigmento rojizo hallado en la superficie rocosa confirma que estas líneas fueron creadas con un pigmento mineral de ocre. Es decir, de una primitiva mezcla de pintura obtenida, probablemente, a partir de materiales recolectados en los alrededores de la cueva andaluza. "Esto implicaría que los autores de estas manchas rojas tuvieron que buscar, seleccionar, recoger y transportar las materias primas que posteriormente se utilizarían en la cavidad", apunta África Pitarch, investigadora principal de este trabajo, publicado este mismo lunes en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS).

Muestra de las marcas rojizas halladas en el interior de la cueva de Ardales, en Málaga. JOÃO ZILHÃO

El estudio de estas pinturas también apunta a que, teniendo en cuenta su edad, estas líneas tuvieron que ser obra de las poblaciones neandertales que por aquel entonces deambulaban por la zona. De hecho, los análisis muestran que estas marcas fueron pintadas en dos etapas; unas hace 65.500 años y otras entre 45.300 y 48.700 años, por lo que parece que esta 'tradición pictórica' pasó de generación en generación. Si la datación se confirma, esto supondría que las primeras pinturas humanas se forjaron uno 20.000 años antes de los 'sapiens' modernos llegaran al continente europeo.

¿La obra de arte más antigua de la humanidad?

La confirmación de que las marcas rojizas halladas en la cueva de Ardales son obra de una mano humana abre una nueva pregunta. ¿Podemos definir estos brochazos como la primera obra de arte de la humanidad? La respuesta, lejos de ser sencilla, apela a un debate mucho más espinoso de lo que podría parecer. El debate sobre qué es arte y qué no también tiene mucho que ver con cómo se describe su origen, su intencionalidad y su función. Así que dependiendo de cómo se defina cada una de estas cuestiones, estos 'brochazos' prehistóricos podrían considerarse (o no) como una muestra de arte rupestre.

Según apuntan los investigadores encargados del estudio de estas marcas, "pintar estalagmitas no se puede considerar arte en un sentido estricto, sino que, más bien, sería el resultado de comportamientos gráficos con el objetivo de perpetuar el significado simbólico de un espacio". Los expertos, de hecho, consideran que estas marcas podrían interpretarse como el inicio de un largo y complejo proceso de construcción de una cultura simbólica. O como el germen del arte, según se mire.

Primer plano de las líneas rojas pintadas en la cueva de Ardales. PEDRO CANTALEJO-DUARTE

El paleoantropólogo João Zilhão, investigador ICREA y supervisor del este estudio, explica que el hecho de que los neandertales se dedicaran a decorar las estalagmitas con pintura roja sugiere que estas poblaciones "buscaban resaltar y perpetuar la importancia de este emplazamiento a través de narraciones transmitidas entre generaciones". Esta práctica también mostraría la voluntad de los neandertales de "fortalecer la cohesión entre los miembros del grupo y su vínculo con el territorio", argumenta el científico en una nota de prensa remitida por la Universitat de Barcelona.

¿Entonces qué sabemos de la obra de arte más antigua de la humanidad? En estos momentos, para hablar con total seguridad de una obra de arte rupestre hace falta dar un pequeño salto en el tiempo. Si lo que buscamos son las representaciones rupestres más antiguas halladas hasta la fecha, la respuesta podría estar en la mano pintada en la cueva cacereña de Maltravieso o en el conjunto de líneas descubierto en la gruta cántabra de La Pasiega, ambas de unos 64.800 años y situadas en España. Si, en cambio, hablamos de arte figurativo, el ejemplo más antiguo identificado hasta la fecha es el gigantesco jabalí de 45.500 años hallado en la isla de Célebes, en Indonesia. Esta cronología podría cambiar radicalmente en cuanto se realice un nuevo hallazgo.