Le gusta su faceta de guitarrista acompañante, pero Luis Medina ha dado un paso más en su carrera con el disco Movimiento, que grabó en plena pandemia y presenta el próximo día 19 de junio en el Teatro Góngora, toda una «responsabilidad», pero también una «gran satisfacción». En este primer trabajo, Medina se acompaña al cante de numerosos artistas, así como de percusión, flauta, bajo y piano. En Movimiento, el guitarrista compone algunas de las letras, en las que rinde homenaje a Paco de Lucía, a su propia ciudad y hasta al mundo del toro. También incluye su propia versión de La Aurora, una adaptación de un poema de Lorca que también cantó Morente, además una composición de El Calli, que cantaba el artista recientemente fallecido.

Después de una carrera atrás, pasa a primera fila con ‘Movimiento’, nada menos que en plena pandemia. ¿Le ha ayudado a decidirse el parón que hemos vivido?

Sí, pero no voy a dejar mi faceta de acompañante porque me gusta mucho. Este disco es un paso adelante para también tener esa vía. Tenía cosas que contar, algunos temas ya dibujados y otros completamente nuevos, y este parón ha sido el momento.

Ha pretendido crear un álbum que le permitiera reflejar quién es. ¿Lo ha conseguido?

Creo que sí. Al ser una autoproducción, he hecho lo que he querido. Es el reflejo y el espejo más sincero del momento en que se compuso y grabó.

Ha compuesto algunas de las letras del disco. ¿Qué manda más, la letra o la música?

La música, porque aunque con la letra cuentes una historia, va sujeta a una música. No tengo un sistema fijo de trabajo. Hay temas en los que he incorporado una letra a una melodía que ya tenía en mente y al revés, porque me gusta mucho escribir.

Como espectador, ¿qué le emociona más, el cante o el toque?

El cante, sin duda. Como me transmite un buen cantaor no me transmite un guitarrista, por muy bueno que sea.

Se estrena discográficamente después de recibir importantes premios y rodar mucho por los escenarios. ¿Está en el camino que quería?

Siempre se busca más, pero poco a poco se van logrando cosas que ni siquiera había pensado. Pero no creo que haya logrado lo que quiero, y aunque lo consiguiera, siempre habrá nuevos retos.

En Córdoba hay un gran respeto por la guitarra. ¿Dónde pondría a esta ciudad respecto a este instrumento?

Córdoba ha aportado mucho a la guitarra, tanto a la solista como a la de acompañamiento. Siempre ha tenido fama de ser una ciudad de grandes guitarristas.

Ha tenido que acudir a la autopromoción para grabar este disco. ¿Cómo ve el panorama flamenco?

Discográficamente, ahora es más complicado en el sentido de que antes había menos opciones musicales y se producían más discos. Actualmente, tienes que ser una gran figura para conseguirlo y muchos hemos optado por la autoproducción, que es más arriesgado y complejo, pero también más agradecido, puesto que grabas lo que quieres y como quieres, es sincero.

¿Qué supone para usted presentar este trabajo en el Teatro Góngora de Córdoba? ¿Siente más la responsabilidad?

Sí, tiene ese plus de responsabilidad porque esta es una ciudad que sabe de arte. Pero, a la vez, también es una satisfacción compartir ese momento con gente a la que quieres, que conoces.