Pablo Hasél tiene hasta este viernes para entregarse pero ya ha anunciado que no tiene ninguna gana de pasar la noche entre rejas. El rapero, cuyo verdadero nombre es Pablo Rivadulla Duró, está condenado por enaltecer al terrorismo e injuriar a la Monarquía en 64 tuits y una canción que carga contra Juan Carlos I, el rey emérito. Sin embargo, su respuesta no ha podido ser más clara, dejando claro que no se arrepiente: el mismo día en el que expira su plazo para entrar en prisión, este leridano ha lanzado una nueva canción en la que carga con dureza contra el actual monarca, Felipe VI.

El tema arranca con una intervención del Rey esta misma semana en la que defiende la libertad de expresión y, tras dedicárselo al "tan mal llamado Gobierno progresista" durante casi medio minuto (la canción dura cuatro en total), Hasél espeta al Rey un "oye tirano" inicial y comienza su diatriba rimada, su "grito republicano". "Odio el reinado opresor, que coma tu familia del contenedor", insiste durante una grabación realizada en la capital del Segrià.

"La Guardia Civil lo que siento examina / voy a decir como Corinna: 'Guillotina!'", proclama también Hasél, evocando a Corinna zu Sayn-Wittgenstein antes de recordar la máquina que ejecutaba las sentencias de muerte durante la Revolución Francesa.

El vídeo, que se puede ver en Youtube y ya lleva más de una decena de millar de visualizaciones, asegura que "como piedras contra Vox sonará este rap", y en el Hásel afirma que no estará nunca "en la cárcel del miedo" y que su micrófono "seguirá siendo incómodo".

Por último Hasél tacha de "hijos de Franco" quienes le han condenado por "ser franco".

"Tendrán que venir a secuestrarme"

Si Hasél usaba su poesía para anunciar que no acudirá voluntariamente a las puertas de la prisión (éste viernes acaba el plazo máximo fijado por la Audiencia Nacional), también insistía en su determinación a través de la prosa. "Tendrán que venir a secuestrarme", señalaba en Twitter, la red social en la que hizo los 64 mensajes por los que ha sido condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Monarquía (junto a otra canción, ésta vez sobre el rey emérito, Juan Carlos I).

Según él, tiene de plazo para ingresar en prisión hasta las 20 horas de este viernes, pero no acudirá. "Sería una humillación indigna acudir por mi propio pie ante una sentencia tan injusta". "Aún falta solidaridad para frenar este grave ataque a nuestras libertades", ha zanjado.

Rifirrafe entre PSOE y Podemos

El hecho de que este rap vaya dirigido al Ejecutivo de Pedro Sánchez es llamativo, ya que el último frente de batalla entre PSOE y Unidas Podemos está en la reforma del Código Penal. Con la condena a Hasél sobre la mesa, el Ministerio de Justicia anunció el pasado lunes su intención de revisar los delitos relacionados con excesos en el ejercicio de la libertad de expresión. Unos minutos más tarde, los morados informaron que presentarían una proposición de ley para despenalizar los delitos de opinión. Según fuentes de Unidas Podemos, ellos ya habían informado a sus socios sobre el registro de esta iniciativa y fue después cuando el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, movió ficha, tal y como explica Miguel Ángel Rodríguez.

La propuesta de los de Iglesias, que en su momento también fue objetivo de las críticas del rapero catalán, recoge la derogación de los delitos de injurias a la Corona y a las instituciones del Estado, contra los sentimientos religiosos y de enaltecimiento del terrorismo. No obstante, en el comunicado enviado por el Gobierno sobre los objetivos de Justicia solo se especifica que se revisarán estos delitos "para que solo se castiguen conductas que supongan claramente la creación de un riesgo para el orden público". Además, los morados proponen la reforma inmediata, mientras el sector socialista aboga por incluirlo en la reforma global del Código Penal.