A la polémica surgida en torno al cese de Juan Antonio Bernier como gerente de la Fundación de Artes Plásticas Rafael Botí, que el pasado miércoles provocó la dimisión de cinco miembros de la comisón técnica y uno del consejo rector de dicha fundación, se unió ayer la petición de la Unión de Artistas Visuales de Andalucía (UAVA) de la «dimisión o, en su caso, el cese», de la presidenta de la institución, Marisa Ruz. En un comunicado, la UAVA, a raíz de estos hechos, «y atendiendo al malestar creado en gran parte de la comunidad artística», pide la renuncia de Ruz «como responsable última de la situación provocada en el seno» de la Fundación Botí, que depende de la Diputación de Córdoba.

En opinión de la UAVA, «esta situación de deterioro de la institución no es sino el resultado de la gestión personalista y presidencialista que ha llevado a cabo en estos cuatro años la responsable política de la fundación», la también vicepresidenta tercera y delegada de Cultura de la Diputación, Marisa Ruz.

Por su parte, el portavoz del PP en la Diputación, Andrés Lorite, advirtió ayer que Ruz tendrá que «dar muchas explicaciones sobre la utilización caprichosa de los puestos de alta dirección» en dicha fundación, dependiente de la institución provincial. Tras estas exigencias, la dirección provincial de IU en Córdoba ha respaldado el trabajo de Ruz al frente de dicha fundación y de la delegación de Cultura de la Diputación.

En concreto y en un comunicado, el responsable de Organización provincial de IU, Sebastián Pérez, valoró «muy positivamente», en nombre de su formación, «la labor de la delegación de Cultura en la institución provincial, que vertebra una programación variada, que cohesiona el territorio y da visibilidad a los artistas y creadores de Córdoba».