Berta Rojas cierra el ciclo de los clásicos del Festival de la Guitarra de Córdoba. Comprometida con el fomento y la difusión de la música latinoamericana para guitarra, en especial de la música de su país, Rojas nos ofreció un concierto de compositores latinoamericanos o de inspiración en los ritmos y melodías de la región.

El primer ejemplo es el compositor mexicano Manuel M. Ponce, quien visita la música europea para laúd barroco con la Suite en La menor, que Andrés Segovia le encargó «en el estilo de Weiss».

En el caso de la Suite Americana se hace el viaje en sentido contrario. Berta Rojas le pidió al compositor británico V. Lindsey Clark una obra con ritmos americanos, y nos la interpreta en sus cuatro movimientos: Galopa, pieza ágil y fresca; Salsa roja, recordando el ritmo que le da nombre; El vuelo de la mariposa, en la que el compositor nos invita a cruzar el océano; y Finale, donde nos ofrece su visión de América, con efectos de arpas, cuatros venezolanos...

En la segunda parte Homenaje, del compositor y guitarrista brasileño Baden Powell, es una serie de arreglos en el que aparecen motivos de varias obras, como el conocido Valse sem nome. Asa branca es también un arreglo de una canción de L. Gonzaga - H. Teixeira. Y, por último, y quizás la parte más esperada, una selección de piezas del compositor paraguayo Agustín Barrios. Berta Rojas es una buena conocedora de la música de Barrios, y en la selección muestra por un lado su faceta más emotiva, como en Choro da Saudade, la obra de trémolo Un sueño en la floresta, o el segundo movimiento de La Catedral andante religioso; y por otro lado el ritmo en Maxixe, y las partes rápidas de La Catedral. En la figura de Barrios vemos el viaje musical de ida y vuelta, ya que en su amplio catálogo tenemos obras basadas en el folclore latinoamericano, y también otras de influencia clásica europea.

Agradecida por su acogida en la vuelta a los escenarios, ya que estuvo propuesta en el 2015 y se tuvo que cancelar por motivos de salud, el público solicitó de nuevo su presencia con varias obras del compositor eje del concierto. La Danza Paraguaya, una especie de himno de los guitarristas de su país, y otras dos que nos titula en guaraní como amor a su tierra.