El vicepresidente de la Asociación de Escritores y Escritoras de Cine de Andalucía (Asecan), Juan Antonio Bermúdez, se felicitó ayer del éxito de la gala de entrega de los premios Asecan 2017, celebrada el sábado, que ha demostrado «que el cine andaluz brilla por sí mismo, no solo por una película».

En declaraciones a Efe, Bermúdez señaló que los premios Asecan «siguen siendo un observatorio privilegiado para hacer una valoración del cine andaluz cada año, y ayer (por el sábado) volvimos a mostrar que está muy vivo, y que no podemos hablar de que hay un momento brillante ligado a una película, sino que hay un camino de muchos años».

Destacó, además, la colaboración con la Fundación SGAE para sacar adelante el trabajo de la entidad desde el 2012, «lo que coincide con un despunte del cine andaluz, porque ya no hablamos de un director o un cineasta concretos, sino de una continuidad en la producción».

En este sentido, recordó que Solas (Benito Zambrano, 1999), «es un puto de giro, el año en que el cine andaluz se cree a sí mismo y se toma en serio, y se descubre que se puede hacer cine desde aquí, con actores de aquí, y que interese más allá de Andalucía, con alicientes como el premio en Berlín, que le da un punto de giro a la propia autoestima al cine andaluz».

De esta forma, ha evolucionado hasta tal punto que «en la asociación de escritores andaluces, año a año tenemos problemas para quedarnos con las nominaciones, lo que entendemos como una bendita complicación».