Coincidiendo con la publicación de un informe de la Jefatura Superior de Policía de Granada fechado en 1965, que alude al asesinato del poeta Federico García Lorca en el entorno de Fuente Grande, en Alfacar (Granada), con detalles de las posibles razones de su muerte, ya que le define como "socialista" y "masón", y le tilda de "prácticas de homosexualismo", el biógrafo y experto en el autor de Fuente Vaqueros Ian Gibson pasó por la Feria del Libro de Córdoba para dar una conferencia sobre la amistad que unió a Lorca, Buñuel y Dalí, manifestando su opinión a este periódico sobre este hallazgo.

Ante estos nuevos datos, que documentan la versión oficial del régimen franquista sobre un asesinato que sigue despertando gran interés, el escritor irlandés asegura que "este informe deshace las mentiras del franquismo", aunque reconoce que "no arroja nueva luz sobre las circunstancias del asesinato" porque todo eso ya se sabía desde el año 1965. "Han salido muchos libros sobre la muerte de Lorca, pero ahora queda claro que es un documento que no se divulgó porque se demostraba que fue fusilado y no murió en una revuelta callejera, como se dijo".

"Yo conocía estos documentos desde hace un año, pero no los publiqué porque, en su momento, tampoco me parecieron tan esenciales", dice el escritor, que, sin embargo, reconoce que "tienen gran importancia". "En el año 1965, cuando la escritora francesa Marcelle Auclair finalizó su biografía de Lorca quiso ver estos papeles, ya que había oído hablar de su existencia", narra el escritor, que explica que entonces Auclair hizo una petición oficial a través de la embajada española en París.

"El Gobierno español no podía obviar esta petición ya que era una escritora muy conocida, así que pidieron un informe a Granada, en el que se dice que la detención fue llevada a cabo por Ramón Ruiz Alonso, que encerró al poeta en los calabozos y lo sacaron de allí para fusilarlo", continúa Gibson, que explica que cuando el Gobierno recibe este documento prefiere "no menearlo" porque "demuestra que llevaban años mintiendo, ya que el mismo Franco decía que Lorca murió mezclado con revoltosos en la calle".

Por otro lado, y aunque Gibson reconoce que "este documento demuestra que Lorca fue asesinado y es importante que se conozca", asegura que tiene "muchos errores". "Es un informe muy incompleto, se equivoca en los nombres de la madre de Lorca y del gobernador civil de ese momento. Son informaciones orales recogidas aquí y allá que se mandan a Madrid, pero lo importante es que se asegura que fue ejecutado por orden del Gobierno Civil y eso es tremendo".

Por su parte, el historiador y presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Granada, Rafael Gil Bracero, advierte igualmente de "errores de bulto" en el relato policial y resta credibilidad a un documento oficial "sin firma ni autoría" pero sí "con intencionalidad". Aunque Fernando Guijarro ve también en el informe la intención de ocultar lo ocurrido por el error que supuso, a su juicio, que la orden del mando franquista de "no tocar" a García Lorca llegara tarde a Granada, después de su asesinato, este periodista e investigador ve sobre todo reforzada su teoría de que el cuerpo fue desenterrado días después, motivo por el que no se precisaría el lugar exacto de su enterramiento.

La publicación del informe también ha despertado cierta crítica por parte del presidente del PP de Granada, Sebastián Pérez, quien en respuesta a los periodistas lamentó que "obsesivamente en campaña electoral" haya quienes quieran "utilizar" la figura del poeta.