La colección Fernández Rivero de fotografía antigua es uno de los archivos fotográficos más importantes de este país. Sus propietarios, Juan Antonio y Teresa, reúnen más de 45.000 piezas únicas y de un enorme valor que ya desearían poseer muchos museos españoles. Esta muestra, que han titulado Magia y realidad , y que se exhibe en el Círculo de la Amistad, recorre en un centenar de piezas la historia de la fotografía mundial a lo largo del siglo XIX con autores como Clifford, Laurent, Hill y Adamson, Beaucorps o Disderi, así como todo tipo de técnicas fotográficas, desde los pioneros daguerrotipos o calotipos a albúminas, ambrotipos, fotos en tres dimensiones o tarjetas de visita.

Se trata de una de las grandes apuestas de esta Bienal, ya que sus fotografías no se habían expuesto con anterioridad, entre ellas una temprana imagen de 1843, tan solo cuatro años después de que Daguerre presentara al mundo el invento de la fotografía y que esta edición de la Bienal homenajea. Una muestra singular que también incluye imágenes cordobesas, con dos instantáneas de 1888 de la compañía Frith y varias cartulinas estereoscópicas que se pueden contemplar en visores de tres dimensiones, así como un hermosísimo retrato de la mujer del diestro Lagartijo, realizado por el fotógrafo cordobés Tomás Molina.

También cuenta con una guía multimedia que se puede seguir en el teléfono móvil a través de unos códigos QR que aportan gran información sobre cada fotografía y su autor.