Los españoles gastaron 141 millones de euros durante el 2012, un 5% menos que en el ejercicio anterior, cuando la cifra se situó en 148,6 millones, un 77,5% respecto al 2001, cuando se superaron los 600 millones de euros, según muestran los datos publicados este jueves por Productores de Música de España (Promusicae). La inevitable caída del mercado físico no ha sido compensada con las ventas digitales que, en referencia a estos datos, aumentó un 4,1% durante el 2012, pero apenas representa un 34% de las ventas totales de música, lejos del 55% de Estados Unidos, por ejemplo. Dentro de esta modalidad, el servicio que más aumentó, con una subida del 93%, fue la suscripción a operadores como Spotify o Deezer, y a otras plataformas ofrecidas por los operadores móviles. En el lado opuesto, los servicios de streaming financiados por publicidad fueron los que más descendieron, casi un 30% menos.

Respecto al formato físico, las ventas de discos alcanzaron en el 2012 los 12 millones de unidades, un 7,9% menos que en el año anterior (13,1 millones de discos). A pesar del resurgimiento del vinilo, los 135.000 LP que se despacharon en España el año pasado son un 4,3% menos que los vendidos en el 2011. En total, el mercado físico, que incluye las ventas de audio y DVD y VHS, se contrajo hasta los 92,8 millones de euros.