La 69 edición de los Globos de Oro no decepcionó en la alfombra roja, donde las estrellas pasearon su glamur, pero sí en su gala, más descafeinada de lo esperado con un Ricky Gervais que prefirió evitar arduas polémicas. El comediante británico, que repetía por tercera ocasión como maestro de ceremonias tras soliviantar a Hollywood con sus comentarios hirientes en la entrega de esos premios en 2010 y 2011, moderó su tono en esta ocasión y sus burlas fueron superadas por las acertadas réplicas que recibió de algunos famosos. Gervais empezó con cierto empuje desacreditando la virilidad del cantante Justin Bieber y menospreciando a los Globos de Oro, aunque terminó por tirar del chiste fácil en sus críticas que vertió, entre otros, sobre Colin Firth, Antonio Banderas y Salma Hayek o Madonna. El presentador usó el sarcasmo para bromear sobre la vida sexual de la cantante de Like a virgin , quien recibió el premio a la mejor canción por el tema Masterpiece de su película W.E. , y Madonna, lejos de amedrentarse, le desafió e directo. "Si soy solo como una virgen, Ricky, entonces por qué no vienes aquí y haces algo al respecto. No he besado a una chica en algunos años, al menos no en televisión", dijo la artista con una sonrisa.

Gervais posteriormente dio paso a Banderas y Hayek para que anunciaran el ganador de mejor comedia televisiva, que fue para Modern Family , y tras asegurar que asumía que eran "gente interesante", arremetió contra su nivel de inglés. "No puedo entender nada de lo que dicen", declaró Gervais con exabrupto incluido, a lo que el español respondió recitando sin complejos en español, lengua que empleó acto seguido la colombiana Sofía Vergara. "Gracias Antonio, gracias Salma por hacer esto un premio internacional", comentó eufórica Vergara. El momento más picante de la gala corrió a cargo de Seth Rogen. "Hola, soy Seth Rogen y en estos momentos estoy tratando de disimular una erección masiva", espetó el actor de Superbad nada más entrar en escena.