La morena de la copla, la reina de las mujeres, la del bordado mantón, la del clavel español, la que prestó su rostro a los casi mil millones de billetes de 100 pesetas en los duros años de la posguerra, es la protagonista de esta nueva obra de Concha Calleja publicada por la editorial Almuzara y titulada La Mujer Morena . Ella, María Teresa López, fue una de las decenas de chicas que se prestaron de manera voluntaria para ser retratadas a principios del pasado siglo por el célebre pintor cordobés Julio Romero de Torres. Ella fue La Chiquita piconera , la adolescente que se calienta los pies en un brasero colmado de trozos de carbón, en una imagen ya para la historia, célebre en todo el mundo. Calleja desgrana su peripecia vital, tan fascinante como desconocida aún, y nos sumerge en el espíritu de una época y unos personajes cuyo atractivo permanece inalterable aún en nuestros días.

Para escribir su obra, la autora departió ampliamente con la propia María Teresa López, que vivió sus últimos días en una residencia de ancianos de Palma del Río (Córdoba), donde falleció en mayo del 2003. El libro recoge con sesgo literario la honda fascinación que la figura del pintor (íntimo de Ramón María del Valle-Inclán, Ortega y Gasset o Juan Belmonte, entre otros) ejerció sobre la joven que, según afirma Calleja en su obra, ya octogenaria protegía al famoso pintor de cualquier comentario que pudiera interpretarse como hostil hacia él.