Para tomar el pulso al cine iberoamericano hay que ir a Huelva, porque su festival --que cumple con esta edición la número treinta y cinco- siempre ha constituido una referencia para los interesados en el tema. Este año, la característica más comentada del evento ha sido la predominancia de películas de nuevos realizadores, con lo que se pretende apuntar aún más en la especificidad de esta muestra, que arrancaba el pasado día 14 con la proyección de la última obra del productor y director Gerardo Herrero, ´El corredor nocturno´, un esquizofrénico thriller sobre un alto ejecutivo y el acoso sufrido por un misterioso tipo que irrumpe en su vida (los actores Miguel Angel Solá y Leonardo Sbaraglia están como acostumbran, muy bien). La sección oficial a concurso alberga otra producción española, Héctor y Bruno de la debutante Ana Rosa Diego, directora hispalense con experiencia en labores de producción. El país que suma más cintas en competición es Argentina, que presenta ´Cuestión de principios´ (entretenida comedia moral sobre esas cosas que no se pueden comprar con dinero, con un Federico Luppi y una Norma Leandro como siempre, estupendos), ´Francia´ (interesante reflexión sobre esos sueños que nunca se cumplirán) y ´La mosca en la ceniza´ (película de Gabriela David). De México llegan dos obras: ´Crónicas chilangas´ (entretenido y divertido debut en el largo de Carlos Enderle) y ´Cinco días sin Nora´ (primera película de Mariana Chenillo, donde narra un curioso velatorio). Portugal es representada por ´Como desenhar um circulo perfeito´, relato tan oscuro como bien filmado de Marco Martins. De Chile, ´La nana es una especie de dogma latino´ firmado por Sebastián Silva; este país coproduce con España el filme ´Navidad´ (Sebastián Lelio) . De Colombia se ha podido ver ´La pasión de Gabriel´ (Luis Alberto Restrepo), de Perú llega ´Paraíso´ (Héctor Gálvez) y desde Bolivia, ´Zona Sur´.
