El Premio Nacional de Ilustración 2009, Miguel Calatayud, afirmó ayer que el libro y la ilustración no se ven amenazados por los videojuegos, porque los niños no pueden encontrar en ellos la emoción de imaginar ni el placer de pasar las páginas que les reportan los libros.

Calatayud participó en unos talleres infantiles organizados por el Ayuntamiento de Córdoba, en los que ha dado a conocer a un total de cien niños cordobeses la evolución de sus ilustraciones, desde sus comienzos en los años 60 hasta sus más recientes novedades. El Premio Nacional de Ilustración destacó que los dibujos promueven la imaginación en los niños y que las imágenes de las obras contribuyen a que los pequeños creen sus propias historias.

El autor comentó que no utiliza el ordenador para crear sino que hace un trabajo "artesanal y muy personal".