El Gran Teatro acogió la noche del pasado sábado el festival en el que la Asociación de Artistas Flamencos de Córdoba hizo entrega de su VI Cordobán a la Peña Flamenca Joven de Castro del Río, por su destacada labor en pro de este arte.

La noche desapacible y los partidos de fútbol televisados tal vez influyeron en que no se llenase el aforo del Gran Teatro como en anteriores ediciones. Faltaron personas conocidas relacionadas con el mundo flamenco cordobés. Los que no fallaron fueron los aficionados de la provincia, muchos de ellos peñistas.

Paco Pérez y Rafael Guerra fueron los encargados de presentar el espectáculo, que se inició con la entrega de la distinción de la noche a la joven y pujante peña castreña. Antonio Vera, su presidente, recogió el galardón de manos de José Rubio, presidente de la asociación organizadora del acto. Por su parte, José Porras Farina impuso el Emblema de Oro de la asociación a José Ruz, director comercial de Bodegas Pérez Barquero, firma que se ha caracterizado por su continuada colaboración con las peñas flamencas.

MAESTROS EN ESCENA Tras la entrega de las distinciones, el espectáculo dio comienzo con Rafael Trenas, la guitarra más solicitada del flamenco en Córdoba, que en esta ocasión se lució como solista, con tarantas y tangos, haciéndose acompañar por el violín de David Muñiz, la percusión de Luis Dorado, el saxofón de Ernesto El Cubano , el bajo de Manuel Fernández y las palmas de Farina, Fran Espinosa y Rocío Barranco en un recital que fue largamente ovacionado por el público. El joven cantaor Pedro Obregón ofreció a continuación cantes por solea, seguiriyas y caracoles, acompañado por Ramón Rodríguez.

Joaquín Rodríguez, con la guitarra de Andrés García, demostró su gran momento interpretando mirabrás, seguiriyas y marianas, que dieron paso al baile por alegría de Chari Jiménez, de poderoso taconeo y ágiles brazos, que bailó acompañada por la voz de Mari Carmen Marín y la música de Luis Calderito, José Porras y Pedro Obregón, con el que concluyó la primera parte.

Con baile también se inició la segunda parte del espectáculo. Daniel Navarro, un cordobés de gran talla como demuestran sus premios, llenó el escenario acompañado por el cante de Enrique El Extremeño y David El Gallo , las guitarras de Ricardo Rivera y Daniel Méndez y la percusión de Antonio Llanos.

José Castellano El Séneca demostró por soleá, malagueñas y cantes de Lucena su indiscutible veteranía, acompañado por la guitarra de José Antonio Díaz.

Cerró el festival el artista invitado, Capullo de Jerez, que cantó soleá por bulería, fandango y bulería con propios arreglos, convirtiendo sus cantes en un gran popurrí que le agrada siempre a un sector del público, terminando su actuación con su propio baile.