Sofía Coppola explora los límites del amor en ´Lost in translation´

Tras el éxito de Las vírgenes suicidas , la realizadora, que cuenta con la colaboración de su padre, Francisco Ford Coppola, en la producción ejecutiva, ha escrito y dirigido su segundo trabajo, que tuvo una cálida acogida por parte del público.

Dos extranjeros en Tokio, una chica casada hace poco y un actor que vivió sus mejores momentos veinte años atrás, protagonizan Lost in translation , una película que habla de amistad y del sentimiento de extrañeza. Filmada en Tokio, la cinta se centra en el encuentro en el hotel de Charlotte, papel que encarna Scarlett Johnsson, que se dio a conocer por su trabajo en El hombre que susurraba a los caballos , y Bob Harris, interpretado por Bill Murray (Los cazafantasmas ).

De amor también habla, aunque como excusa para presentar una historia cotidiana en medio de un enfrentamiento bélico, la realizadora libanesa Randa Chahal Sabbag en La cometa , cuarto largometraje de esta directora nacida en Trípoli en 1953 y especializada en las contiendas armadas que ha padecido su país.

Una niña de dieciséis años es apalabrada por su familia y el consejo de hombres de su aldea libanesa para casarse con su primo, que habita en territorios ocupados por Israel, por lo que deberá atravesar el puesto fronterizo que vigila un soldado del que finalmente se enamora.

La década de los sesenta y la guerra de los Altos del Golán evoca el escenario de esta película protagonizada por Flavia Béchara en el papel de la joven contrayente, quien finalmente se rebela contra la boda forzada y regresa a su aldea en un viaje de vuelta que pretende simbolizar el orden, la normalidad que debiera imperar. En algo más de una hora y cuarto Randa Chahal Sabbag critica la tradicional tensión bélica entre árabes y judíos, y pone en cuestión determinados aspectos relacionados con la situación de la mujer en los países de credo islámico.