La Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí inaugura hoy la exposición de pintura de José María Labrador (1890-1977), que estará abierta al público hasta el 16 de octubre. La muestra, titulada La fuerza de una vocación , presenta una colección antológica y autobiográfica de 50 obras que el pintor cordobés realizó como testigo de la época en la que vivió. Así, Labrador dedicó una parte de su creación a la pintura social derivada de su trabajo en las minas de Río Tinto, donde comenzó a trabajar cuando era muy joven, y refleja en sus obras la tragedia y la dureza de trabajar en ese mundo laboral.
Aunque la temática social resalta en toda la composición, el artista también realizó en sus creaciones un acercamiento al mundo rural. José María Labrador se dedicó durante 87 años a la actividad pictórica y su obra abarca históricamente dos épocas fundamentales de nuestro país, desde la pérdida de las últimas colonias en los primeros años de su trayectoria hasta la transición política que dio paso a la democracia en su muerte.
UNA OBRA SENCILLA
La técnica del artista cordobés presenta una pintura directa, sin complicaciones filosóficas. Labrador eligió para sus obras un lenguaje sencillo que permitiera la conexión entre las pinturas y los destinatarios de sus mensajes, al mismo tiempo que el fondo y la forma se acoplan creando una unidad. El diputado provincial de Cultura, Serafín Pedraza, resaltó la importancia de recuperar la figura de un artista cordobés para ponerlo a disposición de los amantes de la pintura y valoró positivamente el talante con el que se ha organizado la exposición. Asimismo, añadió que "hemos tenido, tenemos y seguiremos teniendo autores de mucho calado que no ocupan las primeras páginas de los catálogos, pero que realizan obras de gran calidad artística".
