GRANADA. Una ovación de ocho minutos sirvió la noche del sábado en el Palacio de Carlos V de la Alhambra para apagar el desgarrador grito con el que Aitana Sánchez Gijón, elevada en una plataforma y sobre un fondo de fuego virtual, pone fin al oratorio trágico Juana de Arco en la Hoguera . El público saludó así la entrega de los actores, pero reconoció, sobre todo, la complejidad escenográfica de la obra ideada por Daniele Abbado. EFE