Madrid subasta un lienzo de Julio Romero de Torres por 70.000

Retrato de Dama", un óleo sobre lienzo, obra del pintor cordobés Julio Romero de Torres fue subastado anoche en la sala Fernando Durán, de Madrid, formando parte de la colección "Subasta de Navidad. Colección de decorativas.2002".

La obra, catalogada en el lote 352, fue licitada hacia las 9 de la noche a partir de un precio de salida de 42.000 euros. El remate quedó fijado en 70.000 euros (incluidos los impuestos) por un comprador anónimo que utilizó el teléfono para hacer efectiva su puja. El cuadro, que se encuentra en buen estado de conservación, tiene unas dimensiones de 96,5 x 114 cm. y aparece firmado de puño y letra del pintor cordobés en el ángulo inferior izquierdo del cuadro.

OTRAS SIMILITUDES

En febrero del pasado año, fue subastada en esta misma galería una obra pictórica, también de Julio Romero, con tantas similitudes, que hacen pensar que pudiera tratarse de la misma obra. En aquella ocasión, "Retrato de la señora de Goya", alcanzó curiosamente, un precio final muy parecido al actual. La subasta fue decidida, finalmente, por el sistema de pujas y ofertas previas, proponiendo su adquisición por un montante de más de 60.000 euros, al que ningún comprador quiso replicar.

El Julio Romero subastado anoche no forma parte de las obras más emblemáticas de su autor. Ello justifica el escaso interés para los responsables municipales que gestionan el patrimonio pictórico de titularidad pública en el que figuran las obras más universales de Julio Romero. La adquisición de este tipo de obras suele producirse a través de donaciones de particulares. En abril del pasado año fue también subastado, en Fernando Durán, un óleo al temple sobre lienzo de 99 x 114 cm. también de Julio Romero de Torres. El precio de remate del Retrato de Dama Sevillana alcanzó los 90.000 euros.

Los retratos de Julio Romero que ofrecen características muy similares en cuanto a la temática, la técnica y los elementos compositivos, proliferaron durante su estancia en Madrid, donde el maestro cordobés llegó a ser un pintor cotizado. Ello justifica el importante número de cuadros realizados en esta época por encargo de la pujante burguesía madrileña de los primeros años de la pasada centuria.

La obra más característica de Julio Romero refleja también retratos de mujeres, alegorías y otros temas propios de su genialidad creadora, donde el artista consigue "una transfiguración a la andaluza" de un mundo estético influenciado por el simbolismo francés, el prerrafaelismo inglés y el renacimiento italiano. La popularidad que hoy suscita su producción artística le lleva a ser un pintor cotizado. Hasta 1.915, su obra fue prácticamente desconocida e incluso rechazada, en determinados círculos. El Poema a Córdoba le convirtió, ese mismo año, en un símbolo de la ciudad.