POESÍA

Memoria y perdón

Cátedra edita la poesía completa de la granadina Mariluz Escribano

Mariluz Escribano

Mariluz Escribano / Francisco Morales Lomas

Memoria y perdón son las dos palabras que mejor definen la lírica de la escritora granadina Mariluz Escribano, cuya poesía completa acaba de publicar Cátedra, en una edición muy intensa al tiempo que bastante sentimental de la profesora de la Universidad de Granada Remedios Sánchez, la persona que más y mejor conoció a Mariluz Escribano a lo largo de toda su vida. Con esta magnífica edición se consolida, de algún modo, la voz de una poeta que no ha sido reconocida hasta hace muy poco con importantes laureles como el décimo Premio de las Letras andaluzas Elio Antonio de Nebrija (2019), el Premio Andalucía de la Crítica (2014), autora clásica del año en Andalucía en 2021...

La edición está conformada por un estudio inicial de ciento treinta páginas, la poesía completa de Escribano con seis libros (’Sonetos del alba’, ‘Desde un mar de silencio’, ‘Canciones de la tarde’, ‘Umbrales de otoño’, ‘El corazón de la gacela’ y ‘Geografía de la memoria’) y un apéndice de inéditos y manuscritos.

En esa amplia introducción existe un apartado específico que analiza la obra, configurada en tres periodos -el clasicismo inaugural (1991-1995), ‘En el nombre del padre. Umbrales de otoño’ (2013) y ‘La voz de la memoria de una poeta-isla’ (2015-2019)- y un recorrido amplio por la biografía de la relegada escritora y al margen del canon que, de alguna forma, Remedios Sánchez quiere retomar con esta obra para incluir a una gran escritora. Es verdad que con una obra breve, seis libros de poemas, pero suficientemente relevantes y significativos para ser considerada como una de las grandes herederas del «ideario de Machado en su actitud y compromiso ético ajustado al mundo que le tocó vivir y sufrir». Porque no debemos olvidar que su padre, director de la Escuela de Magisterio en Granada, fue vilmente asesinado por el fascismo franquista. Y, a pesar de ello, Mariluz Escribano siempre tuvo en su voz las palabras reconciliación y perdón, sin perder la memoria que ella trata de reconstruir una y otra vez en una poesía de gran calidad literaria y enorme altura vital y conmovedora, siempre mirando hacia el corazón del ser humano y lo más profundo de su ser.

Remedios Sánchez ofrece las claves biográficas y vitales de esa terrible posguerra en una síntesis muy lograda, y nos transmite ideas fundamentales como la fortaleza de una mujer que poco a poco se iría convirtiendo en un referente de la sociedad granadina con sus colaboraciones en ‘Patria primero’ y después de ‘Ideal’ durante sesenta años, en la construcción de un ideario progresista de amor a la pequeña patria y a los grandes ideales desde su puesto de catedrática de la Universidad de Granada, y su amor a la defensa de los derechos de la mujer. Empezó a escribir tardíamente, a los treinta y cinco años, con cinco hijos, el trabajo como profesora universitaria y sus proclamas reivindicativas dentro del movimiento del grupo Mujeres Universitarias que lideró. Así se definía como una poeta emboscada para una mujer que con cincuenta y siete años no había publicado poesía y reconocida líder del activismo cívico. Y como dice Sánchez, «una mujer sencilla, que sin ambición de reconocimiento en la ‘premiolítica’ literaria únicamente buscaba la oportunidad de ser leída».

Una poeta heterodoxa que buscaba lo diferente, que se refugió en esa dolorosa memoria para hacer una poesía de gran musicalidad apoyada sobre los heptasílabos, endecasílabos, alejandrinos y pentasílabos, con la que quería transmitir una visión del mundo dolorida pero también profundamente vital, comprometida y esperanzadora cuyas palabras más repetidas según el análisis lexicométrico del profesor Sánchez García eran tristeza/triste, luz, silencio, mar y tiempo, y que «sin rabia, sin inquina porque ya no es posible recuperar lo perdido, tantos hombres y mujeres asesinados, encarcelados, exiliados...» apuesta por reconciliarse con sus asesinos a través de una poesía que se enmarca dentro de un profundo humanismo cívico en su afán por ofrecerse como «valedora de la imprescindible rehabilitación de los derrotados, de los caídos, de los débiles, de los niños, de los que nunca se nombran».

Una lírica que se sustenta sobre la fuerza de las emociones y la vehemencia de un corazón abierto y público donde vive la familia, los amigos, la infancia, el amor a la existencia, en ese gozo sin fondo, en esa desolación imprecisa de afectos y ansiedades. Un reencuentro consigo misma en ese juego de espejos que nos insinúa la memoria, que nos incita, que nos anima con su provocación de tiempo, con la indulgencia de lo querido, aquellos seres que nos permitieron una hendidura en la memoria y permanecieron dormidos hasta su nacimiento. Y entre todos ellos siempre germina el padre asesinado desde la contemplación: «Vivirás en mi verso cuando la luz se acabe,/ por eso yo te canto germinal y sencillo». Es su luz, la luz encendida que guía este canto, a pesar de que sabe perfectamente que el pasado nunca vuelve y es sublime en su recuerdo.

‘Poesía completa’.

Autora: Mariluz Escribano.

Editorial: Cátedra . Madrid, 2022.

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