Cuando un poeta como Fernando de Villena (Granada, 1956) confía a su editor una antología que comprende cuarenta años entregados a una dama tan exigente como es la poesía, algo de solemne, trascendente y magnífico hay en ese acto de donación y altruismo ante sus lectores. Tal ocurre con ‘Las estaciones de la existencia. Antología poética (1980-2020)’, que ha visto la luz este año. Nadie, seguramente, como el propio autor para decidir qué legar a los lectores presentes y futuros de su poesía; esto es, de lo mejor de sí mismo, a pesar de la tan exigente y selectiva poda que ha de realizar sobre su propia obra, tal y como una antología requiere. Una gran responsabilidad en un camino sembrado a veces de vacilaciones y titubeos.
Y nada más evidente en su título que la conciencia del paso del tiempo a través de las estaciones del año y su coincidencia con las diversas etapas de la vida humana en la estructuración de este volumen de trescientas páginas, el cual integra los textos en cinco apartados que se corresponden con las cuatro estaciones y las cuatro etapas de la vida humana: la primavera o juventud, con sus vacilaciones; el estío, que coincide con la madurez; la plenitud del verano, el otoño con su tristeza y el recuento y la sabiduría del invierno; siendo así, pues, que se produce una aparente «disociación» o «desajuste» entre el número de los apartados (cinco), al dedicar el segundo y el tercero, madurez y plenitud, al verano; y no cuatro, cual suelen ser las estaciones.
El lector encontrará en el prólogo de esta completa antología suficiente esclarecimiento a esa visión totalizadora que el mismo autor tiene de su obra poética: «Mi estética inicial fue un neomanierismo o un neobarroco (con la ‘imitatio’ de los clásicos de nuestros Siglos de Oro y también de los grecolatinos)», bajo cuyo ángulo de influencia escribió sus tres primeros libros, pero desde los que diversificó sus ámbitos de búsqueda y tentativa para acercarse a la mitología, a la ciudad de Granada, al jardín y al sucederse de las estaciones; y ello con títulos que van desde ‘Pensil de rimas celestes’ a ‘Poema de las estaciones’ (1980-1991). Ellos suponen las «vacilaciones» de la primavera o de su juventud, parafraseando al poeta.
La segunda etapa, que representa su primera madurez en la línea de un diario lírico emocional, se extendería entre los años 1991-1997, y se extiende desde ‘Vos o la muerte’ a ‘Nuevo museo histórico y escala óptica’, con poemarios cuya temática se refiere al amor a la esposa, los recuerdos de infancia, la música, la evocación o la pintura. De ella pasamos a su etapa de plenitud, punto álgido de su creación poética, con los siete libros dedicados al mar Mediterráneo y a su cultura fecundadora y germinadora de los pueblos que habitaron históricamente sus orillas. Esta etapa se extiende entre los años 1997 y 2004, acercándose a sus ciudades y homenajeando a la Grecia clásica, el sentimiento de la latinidad, ubicándose en el periodo medieval o en la edad de oro; para denunciar, seguidamente, en nuestra época, el naufragio de las pateras y el uso de sus aguas por los buques de guerra de las grandes potencias; ciclo que viene a concluir con el homenaje a diversas figuras vinculadas, histórica y culturalmente, con el mar Mediterráneo.
De alguna manera, a partir de la cuarta etapa de su poesía la temática se va tiñendo de melancolía y desengaño. Al vitalismo sucede el sentimiento elegíaco y el tema de la muerte se hace omnipresente. Está constituida por los libros que van desde ‘Conticinio’ a ‘Una oscura gaviota’, escritos entre los años 1999 y 2014, aunque de esa sombría temática se salvan dos libros: uno sobre las películas que marcaron su vida y otro sobre sus viajes.
La quinta y última etapa «representa la hora del recuento, de la lucidez, de la inquietud religiosa y del compromiso ético y social» (Prólogo, pág. 10) y se extiende a través de los años 2014 a 2020, con libros que van desde ‘Morir por mi demanda’ a ‘Búcaro de cenizas’, en la línea del diario lírico, la acción de gracias, los horrores de nuestro tiempo, así como los nuevos lugares y viajes realizados. Toda una ingente cima de la mejor poesía actual, de un poeta que ha sido fiel a la lírica desde que se inició en ella a los diecisiete de su edad.
‘Las estaciones de la existencia. Antología poética (1980-2020)'
Autor: Fernando de Villena
Editorial: Baker ST Granada, 2022.
