En 2020, Cuadernos del Sur, el suplemento de cultura del Diario CÓRDOBA, recibe el VI Premio Mecenas Manuel Altolaguirre, premio a nivel andaluz que, instituido por la actual Junta de Gobierno de ACE Andalucía en 2014, viniese a reconocer tanto la trayectoria personal como de las instituciones privadas u oficiales que hubiesen contribuido a la difusión de los creadores andaluces, de su obra o del concepto genérico de la propia literatura andaluza en cualquiera de sus manifestaciones.

El premio ofrece al galardonado el título que reconoce la distinción: un precioso guadamecí artesano, labor del exquisito talento de la artista cordobesa María Antonia Cabrera. ¿Y por qué Manuel Altolaguirre? Por razones equívocas, el malagueño ha figurado como mero escolio en la nómina de la Generación del 27, quizás porque nunca saltó al espacio cósmico de la metrópolis madrileña, destino al que los entendidos dicen que es imperioso llegar. Sin embargo, su aislamiento no lo priva de haber creado una obra idéntica o superior en algunos casos a muchos de los nombres repetidos hasta la náusea en los manuales al uso.

Por este injustificado olvido recobramos el nombre del hombre que dedicó toda su vida a la literatura, tanto en la creación como la edición, reavivándola en la trayectoria y obra de personas e instituciones que, en el silencio, integridad y pulcritud de sus trabajos, han manifestado una decidida posición y disposición en pro de los escritores y las letras andaluzas, la mayoría de las veces ponderada por una obra personal de notable relevancia.

El poeta y editor Pere Rovira ironizaba sobre cómo las universidades españolas estaban ansiosas de que algunos autores fallecieran para comenzar a estudiar sus obras. No deseamos que esto ocurra en Andalucía y, por ello, la sección autónoma andaluza de la Asociación Colegial de Escritores de España lleva a cabo un colosal esfuerzo para recuperar los nombres de los silenciados cuando todavía tienen la gozosa oportunidad de saberse distinguidos.

Desde su creación han recibido el Premio Mecenas de la Literatura Andaluza Manuel Altolaguirre sus presidentes honoríficos Rafael de Cózar y Francisco Vélez Nieto, la Fundación Unicaja, el editor malagueño Francisco Peralto, el profesor universitario Antonio Garrido Moraga, la revista literaria Ánfora Nova en la figura de su director José María Molina Caballero y, en 2020, el suplemento cultural Cuadernos del Sur.

En su sexta edición, los diecinueve miembros de la Junta de Gobierno de ACE Andalucía decidieron conceder el premio al suplemento cultural del CÓRDOBA y, en su nombre, al director Rafael Romero y su coordinador, Francisco Expósito, por el decidido empeño en la difusión de las letras andaluzas, convirtiendo la literatura y la cultura en un signo distintivo de la línea editorial del periódico, propiciando de manera inequívoca la visualización de los autores andaluces y su obra, ponderando la lectura como una actividad cultural imprescindible para la sociedad contemporánea y, por todo ello, consolidándose como uno de los suplementos culturales de inexcusable referencia, tanto a nivel andaluz como nacional.

Buque insignia en Andalucía | A.J. GONZÁLEZ

Un suplemento premiado

Los reconocimientos no han dejado de sucederse. El primero de ellos se produce el 4 de abril de 1987. Será la Asociación de la Prensa de Córdoba la que conceda el Premio de Periodismo Ciudad de Córdoba al suplemento subrayando la aportación que Cuadernos del Sur estaba desarrollando en el campo de las artes y las letras. Solo había transcurrido año y medio y ya se evidenciaba la impronta de estas páginas en las que participaban los más relevantes escritores, críticos y artistas del momento. Poco después, la Fundación Cultura y Progreso destacaba la labor de Cuadernos del Sur con el reconocimiento Córdoba, tierra nuestra, galardón que conmemora el nombre de un importante volumen sobre arqueología provincial escrito por el poeta decano de Cántico Juan Bernier.

La creciente atención por el suplemento originó que, en 1992, el Gobierno andaluz, avalado por grandes profesionales de la prensa que conformaron el jurado, le concediera el Premio Andalucía de Periodismo, destinado a distinguir los trabajos periodísticos que, por la originalidad o la calidad de su contenido, mejor hubieran contribuido durante el año anterior al de su convocatoria a reflejar la realidad andaluza y difundir los aspectos y valores culturales, sociales y económicos de la Comunidad Autónoma de Andalucía en las modalidades de prensa, radio, fotografía e internet.

El Gremio de Editores de Cataluña concede al suplemento el Premio Atlántida por el que esta organización empresarial, integrada por personas físicas o jurídicas de carácter privado dedicadas a la edición de libros, pretendía distinguir a personalidades y sociedades por su contribución al fomento de la lectura y el mundo del libro en general. La Fundación José Manuel Lara de Sevilla otorgará en 2004 a Cuadernos del Sur su Premio a la Divulgación de la Cultura, un galardón que destaca la mejor labor de promoción cultural realizada desde Andalucía, utilizando para ello un medio de comunicación o cualquier otra fórmula de difusión de contenidos.

En 2009, el Ministerio de Cultura confiere a Cuadernos del Sur del Córdoba el Premio Nacional al Fomento de la Lectura. El jurado, presidido por Rogelio Blanco, director general entonces del Libro, Archivos y Bibliotecas, otorga el premio al suplemento por su larga trayectoria en la promoción de la lectura, valorando especialmente su vocación de permanencia en un diario local que ha obtenido repercusión nacional.

El eterno retorno

Integrado en el marco informativo del Diario CÓRDOBA, pero con una clara vocación artística orientada primordialmente a la creación literaria, nace el 27 de noviembre de 1986 el suplemento de artes y letras Cuadernos del Sur. Con anterioridad, desde el 30 de mayo de 1985 al 20 de noviembre de 1986, siendo director Manuel Gómez Cardeña, comienza a editarse una serie de suplementos monográficos, con el epígrafe genérico de Córdoba-Cultura, donde se trataron hasta cincuenta y cuatro temas cordobeses.

Aunque nacieron con el ánimo de visualizar la historia cultural de Córdoba (música, antropología, teatro, arqueología, patrimonio), estos monográficos se centraron capitalmente en el arte y la literatura. El primero fue una compilación expositiva en torno a la figura de Luis de Góngora, al que siguieron, entre otros, los dedicados a Séneca, Juan Valera, Romero Barros, Julio Romero de Torres, Antonio Povedano, Mario López o Manuel Álvarez Ortega.

Pero la piedra angular de esta publicación podría fijarse en el año 1979, cuando Antonio Rodríguez Jiménez, avalado por los poetas cordobeses Luis Jiménez Martos y Carlos Clementson, convenció al entonces director del CÓRDOBA, Federico Miraz, para la creación y publicación semanal de una página dedicada a la crítica literaria, con el nombre de Pliegos de Cordel, en la que participó activamente el profesor cordobés Pedro Roso, que permaneció activa durante año y medio.

Con la convicción original de dar a conocer las novedades culturales acaecidas en la ciudad de Córdoba, Cuadernos del Sur nacía con clara inspiración andalucista que más tarde aspiraría al ámbito nacional e internacional con idéntica disposición de recoger efemérides, reseñas críticas, estudios monográficos y columnas periódicas de opinión relacionadas con el universo cultural, consuetudinariamente relegado.

Es justo destacar, durante la dilatada trayectoria de Cuadernos del Sur, el esencial papel de los diferentes directores que han pasado por el periódico, todos ellos conscientes de la valiosa aportación del suplemento a la vida cultural de Córdoba y la relevancia de su difusión en la geografía nacional. La firme convicción de Antonio Ramos Espejo, José Higuero, Alfonso S. Palomares, Francisco Luis Córdoba Berjillos y, en la actualidad, Rafael Romero, han hecho posible que el suplemento se haya mantenido con un equipo acreditado de profesionales: algunos de ellos, ya de reconocido prestigio, comenzaron aquí su andadura como columnistas y críticos.

Pero sin duda han sido los tres coordinadores del suplemento: Antonio Rodríguez Jiménez, Francisco A. Carrasco Jiménez y Francisco Expósito Extremera quienes, desde su fundación, han mantenido, con su dedicación y esfuerzo, el suplemento en la cúspide de las publicaciones periódicas de Andalucía, obteniendo un resonante eco en el horizonte nacional, superando con creces las mil trescientas ediciones y, gracias a internet y las redes sociales, abriendo su conocimiento al mundo entero.

Cuadernos del Sur en la actualidad

Este año se celebra un doble aniversario: El de los treinta y cinco años de existencia de Cuadernos del Sur (1986-2021) y los ochenta años de la primera edición del Córdoba (1941-2021). Tanto el diario como su suplemento se han convertido a lo largo de los años en referentes de la noticia y la cultura de nuestra capital y provincia, habiendo traspasado el suplemento los límites locales y convirtiéndose en el medio de difusión más duradero y reconocido de la literatura dentro y fuera de nuestras fronteras.

Coordinado en la actualidad por el periodista Francisco Expósito, son cuatro las plumas que se alternan en la página dos del suplemento: Juana Castro (Ventanas), Manuel Gahete (Seres de babel), María Ángeles Pérez (Amaneceres) y Alejandro López Andrada (El zaguán), siendo habitual Luis Santillán (Cartas del Norte), junto a Francisco Morales Lomas (Poesía/Novela) que cierra el suplemento, acompañado de las columnas alternantes de Antonio Moreno Ayora (Torre de gules), Francisco Gálvez (Modos de mirar) y Javier Sánchez Menéndez (Las Guardas).

Son colaboradores asiduos de las páginas centrales e intermedias Juana Vázquez (entrevistas), Pedro M. Domene (entrevistas y reseñas), Eduardo Moyano, Alberto Monterroso, Manuel Molina González, Antonio González Carrillo, Pedro García Cueto, Pilar Muñoz Aguilar, Francisco Onieva, Antonio Moreno Ayora, Félix Ángel Moreno Ruiz, Antonio Luis Ginés, Carmen Canet, Manuel Ángel Morales Escudero, Manuel Gahete, Ricardo Bellveser, José Antonio Sáez, Alejandro López Andrada, Juan María Prieto, José Luis Rey, José Reyes de la Rosa, José Sarria, B. Villalón, Carlos Clementson, Juana Castro, Mohamed Abrighach, Bernd Dietz, Francisco A. Carrasco, Rafaela Hames Castillo, Antonio Varo Baena, José García Obrero o el propio Francisco Expósito.

Evocamos los nombres de Pablo García Baena, Jacinto López Gorge, Pedro Roso y Antonio Garrido Moraga, que lamentablemente nos dejaron en el largo periplo de los Cuadernos de Sur, cuya estela sigue marcando, como buque insignia, el rumbo de los suplementos culturales de la comunidad andaluza y, desde Córdoba, al mundo entero.